Los datos no mienten. Reinas fue un auténtico fracaso de audiencias. Su primer enfrentamiento ante el público se cerró con una mala noticia: la serie marcó el tercer peor estreno de una serie de producción propia en TVE. La serie producida por José Luis Moreno sólo conquistó a un 11% de cuota de pantalla, manteniendo durante el primer capítulo una media de 1.947.000 espectadores. 

Reinas es uno de los mayores fracasos en ficción de los últimos años en TVE

Sólo dos series tuvieron peor resultado en su primera noche ante la audiencia: Stamos Okupa2 en 2012 e iFamily, en 2017. La primera se estrenó con un 8,8% de cuota de pantalla y 1.357.000 espectadores, mientras que la segunda se quedó con un 8,7% y 1.520.000 espectadores.

Tras sus seis episodios, la ficción histórica se despidió con apenas un 7,4% y 1.270.000 espectadores, lo que le convertía en uno de los mayores fracasos en ficción de los últimos años dentro del ente público, con permiso de las ya citadas Stamos Okupa2 e iFamily.

A pesar de ello, el productor español no ha dudado en calificar el proyecto de "gran éxito", en unas declaraciones recogidas por Vanitatis, donde se atreven incluso a hablar del "pelotazo internacional" de Moreno por haber vendido la serie a la distribuidora Global Agency.

Sin embargo, sólo hay que acudir a internet para comprobar que esta distribuidora con sede en Turquía cuenta con series prácticamente desconocidas a nivel internacional y de dudosa calidad. 

Lo más curioso, además, es que Moreno explicó en la rueda de prensa de presentación de la ficción que Reinas sería emitida en la BBC. Sin embargo, no ha habido ni rastro de esta ficción en la televisión pública inglesa.

¿CUANTO INVIRTIÓ RTVE?

2,1 millones de euros. Esa es la cantidad que supuestamente costó cada capítulo de Reinas, según el propio José Luis Moreno. Sin embargo, la cadena pública se negó a revelar cuál fue su aportación.

Después de que TVE y Moreno se negaran a explicar cómo se habían repartido la producción de la serie ante las preguntas de este portal durante la rueda de prensa de presentación de la ficción, BLUPER acudió al portal de la transparencia para conocer estos detalles.

Divulgar la información solicitada perjudicaría de forma directa los intereses comerciales de RTVE

Sin embargo, una vez más, la cadena pública se negó en aportar esta información porque “perjudicaría de forma directa sus intereses comerciales”.  “Divulgar la información solicitada perjudicaría de forma directa los intereses comerciales de RTVE ya que tanto sus competidores como sus proveedores tendrían acceso a una información estratégica de RTVE”, se defendía la Corporacion.

“Si los otros operadores de televisión y las empresas productores conocieran los precios abonados por esta Corporación para la producción de un determinado programa, quedarían dificultades de forma evidente las futuras negociaciones para la contratación de la producción de programas y se influiría en la fijación de los precios a pagar por la misma”, añadía.

Esta actitud es la misma utilizada por los directivos de la cadena cuando se le pregunta por ello. “TVE participa en la serie con los derechos en España y luego también en su comercialización. Entramos en esa producción internacional con más partners. La inversión en la producción es menor a lo que se gasta en cualquier serie de encargo”, indicaba el director de ficción de RTVE, Fernando López Puig.

“Las exigencias económicas de la producción eran de tal envergadura que teníamos que involucrar a diferentes grupos. Indiana Pictures es uno. Hay un grupo inglés al que yo represento. Hay gente que ha visto teasers y hay mucha gente interesada. Para hacerlo fácil y rápido, esto ha sido una cosa de TVE y mía”, respondía José Luis Moreno. “La productora ha sido la voluntad. La voluntad de que se hiciera”, añadía.

ASÍ ESQUIVA LA ILEGALIDAD TVE

Pero esta no es la única duda alrededor de esta ficción. Debido a la ley que impide que una empresa que debe dinero a Hacienda trabaje con la cadena pública, Moreno no podría trabajar con TVE ya que el productor debía por entonces 3,4 millones de euros a Hacienda.

Sin embargo, la cadena y el productor encontraron la forma de burlar esta ley. TVE contrató los derechos de emisión de Reinascon Indiana Pictures S.L, un productora que se encuentra “al corriente de sus obligaciones tanto tributarias como con la Seguridad Social”, según la cadena.

No obstante, en BLUPER constatábamos que desde unas de estas productoras, Kulteperalia S.L., que debía entonces al fisco 1.937.222, 13 euros, se estaban solicitando "maquilladores y/o peluqueros expertos en pelucas" para una importante serie de televisión de época.  

Asimismo, en los títulos de crédito de la serie también aparece la empresa Crystal Forest, propiedad de José Luis Moreno, como encargados de la producción de la ficción.