La casa de papel se merecía un final a lo grande. Después de 15 episodios, la serie de Antena 3 ha desvelado este jueves cómo ha terminado el mayor atraco a la Casa de la Moneda y Timbre. Lo que era seguro desde el arranque del episodio es que los atracadores saldrían de su encierro. La gran duda de los espectadores era si saldrían triunfando, arrestados o muertos. Y la verdad es que ha habido un poco de todo en este episodio final.
El CNI y el equipo de la Policía se ha cansado y quieren entrar para reventar el atraco. Sabiendo que los atracadores están ganando y tienen muchas posibilidades de ganar, la Policía entra en la Casa de la Moneda y Timbre dispuestos a arrasar con todo lo que se encuentren por el camino.
Sin embargo, el Profesor tiene todo pensado para estos minutos finales de su gran plan. El único problema es que se ha enamorado de Raquel Murillo, la encargada de investigar el mismo atraco. Un enamoramiento que al principio era fingido y que al final ha terminado siendo real. Ahora sólo faltaba por descubrir si era un amor correspondido o no.
Raquel tiene en sus manos el plan de los atracadores
Raquel ha encontrado la guarida del Profesor y quiere terminar con él. Pero en el momento de la verdad termina confiando en él y pidiéndole que la deje libre para ir a ver a su compañero Ángel, que ha despertado del coma. Allí será pillada por sus antiguos compañeros y será detenida. Con todo lo que sabe Raquel sobre el plan del Profesor parecía que todo se vendría abajo.
Mientras, los secuestradores se preparan para salir. Después de 128 horas de atraco y de 984 millones de euros en sus manos, los atracadores tienen todo preparado para ser ricos fuera de esas cuatro paredes. Pero la entrada de la Policía a su escondite termina con todos sus planes y todo se convierte en un ir y venir de balas. Un tiroteo en el que cualquiera puede caer.
Berlín, el malo de la película, se convierte en un héroe inesperado
Los atracadores deciden salir corriendo por el tunel que tenían preparado y que llevaba directamente hasta la guarida del Profesor. Parecía que no lo iban a conseguir. Pero Berlín, el malo de la película, se convierte en un héroe inesperado y decide quedarse atrás para proteger al resto de sus compañeros. En un tiroteo que dura varios minutos logra retener a la policía en un pasillo mientras el resto del equipo se escapa.
Los minutos finales
Raquel no tiene más remedio que decir dónde se esconde el Profesor cuando es amenazada por el CNI con retirarle la custodia de su hija. En ese momento, la historia se convierte en una contrarreloj. O los atracadores logran salir o la policía llega a su escondite. La resulución no llega hasta los minutos finales: escondidos en un camión de cervezas, el Profesor y Helsinki se van con el dinero. Tokio abandona el hangar por un lado, sonriendo a Río al otro lado de la calle. Denver y Mónica se van juntos, de la mano y con un carrito de bebé. Todos felices, triunfan en su plan.
La serie da un salto temporal de un año en su escena final. La inspectora Murillo está viendo las noticias, donde se recuerda que hace un año de aquel histórico atraco a una institución española. De pronto, descubre que su amado profesor le ha dejado un código secreto en las postales que una vez revisaron juntos. Unas coordenadas que la llevarán a Filipinas. Desde allí se hará un guiño al primer episodio de la serie. Ella busca un cargador en un bar y allí está él, esperándola y dispuesto a iniciar su verdadera historia de amor.