La primera noticia sobre El accidente sienta como un jarro de agua fría: el piloto dura 90 minutos. Se trata de un arranque con mucha historia, en el que hay que explicar a muchos personajes y un detonante no muy común en una serie de televisión. Había que esperar a ver si esos 90 minutos son necesarios como para ir a la contra del actual consumo que hay en la televisión. Y no.
Si bien la serie explota muy pronto, lo que mantiene en todo momento la atención del espectador en los primeros minutos, la segunda mitad del episodio piloto se va desinflando por el simple hecho de contener minutos de más. Un capítulo con un excelente punto de salida que, por cansancio y relleno, va perdiendo fuerza y calidad.
La primera parte del primer episodio de El accidente es de intriga, de drama y de sospecha. Un gran thriller capitaneado por la excelente interpretación de Inma Cuesta. La actriz se come la cámara con esos primeros planos que transmiten angustia al espectador. A partir de ahí, la serie se convierte en un drama familiar en donde la intriga se da en dosis de cuentagotas.
La serie se convierte en un drama familiar en donde la intriga se da en dosis de cuentagotas
El accidente ha intentado abrir todos sus frentes en este primer capítulo. Parece que no se ha reservado nada para el resto de la temporada. Y es que parece que el piloto va a terminar hasta en cinco ocasiones. Cuando uno cree que van a aparecer los títulos de crédito aparece otra escena. Y otra. Y otra. Tanto, que las ganas de un estreno acaban apagándose.
Tanto es el giro que se produce en este episodio piloto que lo que parece un gran thriller de intriga (en lo que parece que terminará convirtiéndose) es en realidad un problema matrimonial. El drama de un hombre y una mujer donde no entra la acción. De amores imposibles. De envidias. Y esto es sólo culpa de un episodio piloto demasiado largo que no hace justicia a la serie.
Una cosa es conectar con los personajes y otra muy distinta es hacerles a todos humanos. Y El accidente humaniza a todos los personajes, buenos y malos, demasiado rápido. No da tiempo a la evolución y le concede a todos un fondo familiar innecesario en muchos casos. No se necesita saber el grupo sanguíneo de alguien para conocer su objetivo.
El accidente es un buen thriller cuando es thriller. Es una buena serie de intriga cuando hay intriga. Es una serie que debería haberse atrevido a durar menos. Y no hablamos de minutos en este episodio piloto, sino a saber condensar en menos capítulos. Saber contar lo que hay que contar sin perderse por el camino. Y El accidente se pierde en demasiados momentos.