RTVE confirmaba anoche lo que se venía rumoreando desde que la cadena anunciara el pasado abril que produciría una nueva edición de Operación Triunfo: nuestro representante en el Festival de Eurovisión 2018 saldrá del concurso musical.
RTVE ha querido esperar a ver si OT era un éxito de audiencia
Un anuncio que poco sorprendía a la audiencia, pero que dejaba un interrogante: ¿por qué la directora de entretenimiento de TVE, Toñi Prieto, ha comentado en más de una ocasión que llevan trabajando desde junio en Eurovisión si finalmente nuestro representante saldrá de OT como se dijo en un principio?
Las alarmas saltaba en mayo. Informe Semanal asegurara que Operación Triunfo sería el sistema de elección de nuestro representante en Eurovisión 2018. Una afirmación que solo unas horas después negaba la cadena.
"En este momento la decisión no está tomada. No sé si en el futuro decidiremos eso, pero en este momento eso no es verdad", explicaba la jefa de delegación española, Ana María Bordás, durante una rueda de prensa de Manel Navarro en Kiev.
Y así era. Un año más, en RTVE han decidido jugar a la improvisación. Sin saber si Operación Triunfo sería un éxito, la dirección decidió trabajar en sus opciones habituales: tantear la industria para ver si puede elegir a un artista del que esa fácilmente justificable el ‘dedazo’ y, si no resultaba, alumbrar una preselección.
Reuniones con representantes
De hecho, como ya contábamos hace ahora dos semanas, Prieto ha mantenido diversas reuniones con representantes de algunos artistas durante las últimas fechas para encontrar al candidato perfecto.
Sin embargo, en TVE no estaban muy seguros de esta alternativa y, tras la notable acogida de Operación Triunfo, la opción de hacer una preselección con los finalistas del talent show de Gestmusic es la que cobró más fuerza en los pasillos de Prado del Rey.
Es más, Prieto ya ha dado la orden de pedir canciones a distintos compositores para que estas puedan ser defendidas en la preselección con concursantes de Operación Triunfo allá por el mes de febrero.
De esta forma, teniendo en cuenta los datos de audiencia del concurso, la cadena mataría dos pájaros de un tiro: alargaría un par de semanas su programa estrella y se aseguraría mejorar los datos de las últimas preselecciones.
Este año, por ejemplo, Objetivo Eurovisión anotó un pobre 8,9% y 1,4 millones de espectadores, y un año antes un 9,1% y 1.669.000 espectadores. Este lunes, Operación Triunfo siguió subiendo hasta promediar un 17,8% de cuota y 2.138.000 espectadores.
Además, teniendo en cuenta el fenómeno que se ha generado en torno al concurso, la cadena también se asegura la expectación de cara a la final de Eurovisión, la cual había decaído en los dos últimos años con Barei y Manel Navarro como representantes.