Han pasado ya dos meses desde que Movistar+ iniciara su aventura en el mundo de las series originales como ya hicieran el resto de plataformas de vídeo bajo demanda extranjeras. Pero ha sido Vergüenza la serie que le ha concedido una imagen propia a Movistar+. Ha sido Vergüenza la que se ha convertido en un punto diferenciador para la plataforma de Telefónica.
En estos dos meses, Movistar+ se lanzó al mundo de los originales con Velvet Colección, su primer estreno, y con La Zona. La primera era una continuación de una ficción que ya escribió Antena 3 durante cuatro temporadas, por lo que no era un original al 100%. La Zona, más allá de su factura impecable, es una serie de televisión que se podría haber visto en el abierto en cualquier momento si ese guión hubiese terminado en las manos de otros.
Vergüenza, sin embargo, es una serie puramente de televisión de pago. Es una ficción que no se podría ver en ningún canal en abierto. Es una serie de televisión que ha entendido cuál era su lugar y su sitio y ha sabido aprovecharlo.
Ha sido la primera ficción de Movistar+ que se ha colgado de forma íntegra en la plataforma. Desde que se estrenara, toda la primera temporada se puede ver ya en el servicio de bajo demanda. Se trata de una estrategia con la que nació Netflix y que supuso una gran revolución en el sector. Las otros dos series estrenadas por Movistar+ se habían emitido semana a semana, de una forma mucho más tradicional.
Vergüenza es una serie incómoda, que te obliga a cerrar los ojos en ciertas ocasiones
Movistar+ ha sabido aprovechar su oportunidad de estar en el pago para hacer un producto totalmente distinto a lo que estamos acostumbrados. Mucho más rompedor. Y es que Vergüenza es una serie incómoda, que te obliga a cerrar los ojos en ciertas ocasiones. Y no es porque cause miedo o porque aparezcan escenas grotescas y asquerosas. Es el poder del guión y de la interpretación.
Protagonizada por Javier Gutiérrez y Malena Alterio, interpretan a una pareja atípica que se enfrentan a situaciones algo surrealistas. En la mayoría son ocasiones provocadas por la forma de ser de Jesús Gutiérrez (Javier Gutiérrez), un personaje tosco y que causa rechazo y que a la vez engancha. Pero no hay que olvidar al excelente personaje, triste y truncado, que interpreta Alterio. Una mujer a la que la vida no le sonríe y que tampoco intenta sonreír.
Vergüenza consigue llamar la atención desde el primer momento. Es, hasta la fecha, la serie más barata de Movistar+ y la que más llama la atención por aquello de ser un producto totalmente diferente. Todo lo que se le pedía a Movistar+: ofrecer algo distinto. Vergüenza lo es y, además, con nota.