A sólo un día de que se conozcan las canciones que les tocará defender a los cinco finalistas de Operación Triunfo para convertirse en nuestro representante en el próximo Festival de Eurovisión, poco o nada se sabe sobre estos temas.

Un año más, TVE ha jugado al oscurantismo y sólo sabemos que estas canciones -para las que no se ha abierto un concurso público- tenían que ser en español y que los jóvenes tendrán solo una semana para preparárselas. 

Los compositores ceden el 50% de los derechos de manera libre y gratuita

Lo que sí sabemos son las abusivas condiciones a las que se enfrentarán el compositor o compositores que sean los seleccionados y que, a buen seguro, desconocieran cuando presentaron sus propuestas a la cadena pública.

Como ya publicamos en exclusiva el pasado año en BLUPER, al hacerse con la victoria del sistema de preselección nacional o ser elegido de manera interna por RTVE, los responsables de la autoría del tema que abandera España en el Festival de Eurovisión renuncian al 50% de los derechos editoriales del mismo.

El contrato de edición en general tiene como finalidad regular la cesión de algunos derechos por parte del autor o compositor a un editor para que reproduzca y distribuya la obra. El autor cede derechos a cambio de una contraprestación económica y es el editor el que corre con los riesgos de editar la obra. En el ámbito musical el editor desarrolla principalmente la función de explotación y gestión de los derechos de un compositor sobre sus obras.

En el caso de Eurovisión, tal como establece en sus primeros epígrafes el contrato que deben firmar los creadores del tema y el artista, estos son forzados a ceder a TVE, de manera libre y gratuita, la mitad de los derechos transferibles del tema aspirante a ganar el Festival.

El ente público ha incluido esta cláusula en sus contratos durante los últimos años con la excepción del periodo que va de 2005 a 2008, en el que representaron a España Son de sol con Brujería, Las Ketchup con Un BloodyMary, D*Nasch con I love you mi vida y Rodolofo Chikilicuatre con Baila el chiki chiki .

Ya en 2009, después de las importantes ganancias generadas por el Baila el chiki chiki, el ente público volvió a incluir esta claúsula respecto a los derechos editoriales de sus temas en Eurovisión en sus contratos.

Esta estrategia, inédita e inconcebible en otras televisiones públicas europeas, hace así beneficiaria directa a Televisión Española de la mitad exacta de los ingresos editoriales (los royalties generados en concepto de derechos de autor) del tema.

La Ley de Propiedad Intelectual no establece porcentajes mínimos o máximos de participación del editor sobre los ingresos de la obra, más allá del derecho del autor a una participación proporcional en los ingresos de la explotación.

Ha sido la SGAE, no obstante, la que ha establecido una regla en su regulación interna que consiste en que el editor no puede participar en más de un 50% sobre los ingresos generados por las obras.

No obstante, en los años 2010 y 2011, en el que TVE acudió a Eurovisión con Algo pequeñito y Que me quiten lo bailao, la Corporación Radio y Televisión Española S.A aparece como única editora de los temas.