Ana Julia Quezada, la presunta asesina del pequeño Gabriel, habló con laSexta sólo un día antes de que fuera detenida. En la entrevista, la mujer llegó a mostrar su preocupación por la desaparición del niño y decir que no se explicaba cómo alguien podría hacer daño al chico.
"Nadie le puede hacer daño a Gabriel, es un angelito, nadie", decía Quezada. "Nos dicen que comamos, que durmamos, pero es imposible, si no es con medicamento no podemos dormir".
Sobre el episodio de la camiseta, reconocía que era extraño que ella misma la hubiera encontrado, pero le restaba importancia: "Es extraño pero nos da igual, lo importante es que aparezca Gabriel. La hayamos encontrado nosotros nos da igual. Nos da esperanza".
Asimismo, días antes también hablaba con La mañana de La 1. "Estuvimos desayunando esa mañana y salió la conversación con al abuela y le dijimos que si veía un desconocido, corriera. Y mira por donde ese día desapareció el niño".