Contra todo pronóstico, la selección de fútbol de Uruguay se alzaba con la victoria en la Copa Mundial de Fútbol de 1950 tras ganar a Brasil por 1-2 en el estadio de Maracaná de Río de Janeiro. A aquella épica victoria se le empezó a conocer como el Maracanazo. Desde entonces, siempre que un equipo se ha alzado con la victoria en una final, en un campo ajeno, se ha utilizado ese término para hablar de dicha proeza.
Serrat grabó versiones del La, la, la en inglés, francés, italiano y catalán
Dieciocho años después, el 6 de abril de 1968, el Festival de Eurovisión también vivía su propio Maracanazo: España arrebata el triunfo en el certamen europeo de la canción a la favorita Reino Unido en el mismísimo Royal Albert Hall de Londres, en la penúltima votación y ante la incredulidad de los ingleses.
Un triunfo épico y bastante rocambolesco. Y es que ya forma parte de la historia de España el hecho de que Joan Manuel Serrat tenía que haber sido nuestro representante en la edición de aquel año con la canción La, la, la. De hecho, un mes antes de la cita en Londres, TVE realizó un especial con el título de "Así es, así canta, así compone Joan Manuel Serrat" en el que se interpretaron algunos temas en catalán y sirvió para promocionar a nuestro "joven representante".
Pero, además, por si fuera poco, también se grabaron distintas versiones de la canción en otras idiomas para su promoción internacional. Sin embargo, precisamente una de esas versiones, en catalán, terminó por apartar al cantante del certamen. No obstante, al contrario de lo que siempre se ha pensado, Serrat no fue a Eurovisión no sólo porque no le dejaban cantar en catalán: el problema fueron los derechos de la canción.
Según recordaba el blog La Cabeza Llena citando el libro publicado en 1981, La trastienda de TVE, el cantante no fue nuestro representante aquel año por un tema de derechos y por el farol que lanzó su discográfica a TVE.
El farol de la discográfica
Como era costumbre en aquella época, TVE hizo una selección entre discográficas y Zafiro propuso tres canciones: Nos falta fe, de Juan y Junior, Los titiriteros, de Serrat; y La, la, la, del Dúo Dinámico. Finalmente, la pública tomó una decisión salomónica y se decantó por La, la, la, pero pidió que la cantase Serrat.
La discográfica propuso que Serrat cantara en castellano con una estrofa en catalán
Ya en Alemania, donde se fueron a grabar la canción, Serrat propuso grabar una versión en catalán, aunque tuvo que improvisar la letra sobre la marcha. Sin embargo, los derechos de esta versión se vendieron a otra pequeña discográfica llamada Edigsa.
A su vez, los fans de Serrat y algunos miembros de la élite cultural catalana empiezan a presionar al cantante para que la interpretación sea en catalán hasta el punto de que a su casa empiezan a llegar cartas con insultos y amenazas.
En este contexto, Zafiro propone que para contentar a todos, Serrat cante en castellano con una estrofa en catalán. Ellos no perderían su inversión en la canción, sus fans se quedarían tranquilos y el régimen podría mostrar una imagen moderna al permitir cantar en catalán en Europa.
Sin embargo, la fórmula elegida para convencer a TVE fue errónea: anunciaron que Serrat no iría a Londres si no podía cantar su canción en catalán. Una medida de presión ante la que el Gobierno no cedió y directamente decidió que el catalán no sería su representante.
El turno de Massiel
La historia ya la conocen. A menos de dos semanas de aquel Festival, Massiel recibe en México, donde estaba de gira, la llamada de TVE para sustituir a Serrat. La cantante aceptó a pesar de que su padre le advirtió que le iban a “crujir”. Sin embargo, lo vio como una gran oportunidad para darse a conocer.
“He recibido siete llamadas telefónicas y aún no sé a lo que vengo. Tendré que aprenderme la canción a marchas forzadas porque ni siquiera la conozco”, decía Massiel en el aeropuerto recién aterrizada y aún con un marcado acento mexicano.
El Dúo Dinámico decía que tenía que haber ido Karina por ser más comercial
Rápidamente la cantante se puso a trabajar en la canción para la que, además, trabajó en una interpretación de actriz. Sin embargo, la confianza en ella era casi nula y más teniendo en frente a toda una estrella internacional como Cliff Richard. De hecho en el ensayo general el Dúo Dinámico decían que 'Tenía que haber venido Karina, que es muy comercial'”.
Sin embargo, para sorpresas de todos, la tanqueta de Leganitos dio un auténtico ‘Massielazo’ y consiguió el primer y único triunfo en solitario de España en Eurovisión. Fue, además, en una final de infarto. Antes de la penúltima votación, Reino Unido encabezaba la tabla con 26 puntos por los 23 puntos de España. Alemania dio dos puntos a Cliff Richard y seis a Massiel, que pasó a encabezar la clasificación a falta de que votara Yugoslavia.
"Estamos a punto de sufrir un ataque de corazón, un infarto de miocardio", decía el comentarista de TVE, Federico Gallo, antes de que el jurado yugoslavo dejara sin votos a España y Reino Unido, lo que convertía a nuestro país en el ganador de la edición.