Maestros de la costura ya está llegando a su fin. Este lunes se emitió en TVE la semifinal de la primera edición del talent show con los últimos cinco concursantes que quedaban en el programa. Uno tenía que decir adiós y quedarse en las puertas de la gran final.
La primera prueba trató de teatro. Los concursantes tenían que confeccionar un traje clásico de teatro que el jurado previamente les había enseñado. Fue la prueba más larga del programa, pues tuvieron 180 minutos para hacer este vestido. Mahi empezó a tener problemas desde el principio, yendo más retrasada que sus compañeros. Como resultado, la compañera no pudo terminar la capa que cubría el traje de la mujer y presentó su obra sin acabar.
Antonio fue el que consiguió el primer puesto de la primera prueba y fue jefe de taller en la prueba por equipos. Eligió a Eduardo como el jefe de taller del equipo contrario y a Alicia como su compañera. El programa le dio la oportunidad de tener un tercer compañero a Antonio, que en este caso sería Mahi, o una sorpresa durante la prueba. Antonio eligió la sorpresa, que eran 15 minutos extra de tiempo respecto al otro equipo.
Los concursantes fueron al taller de El Ganso y tuvieron que replicar unos polos para el equipo español de Hockey. Antonio y Alicia harían los de mujer, en distintas tallas, y Eduardo, Mahi y Luisa hicieron los polos de hombre. Como sorpresa, el jurado eligió al Eduardo como el concursante que se salvaría de la prueba de expulsión. El resto tuvieron que pasar por la prueba final.
Este este duelo definitivo para pasar a la gran final del programa, los concursantes tuvieron que confeccionar un corsé. Mahi fue la más atrevida al elegir el vinilo como tela, pero la prueba se le fue complicado según pasaba el tiempo. Alicia fue elegida como la mejor concursante de esta prueba y entre Antonio, Luisa y Mahi había que elegir a un expulsado.
Caprile, como cada lunes, fue el encargado de dar el nombre del concursante que no lograba pasar a la gran final del programa. La señalada era Mahi. La concursante más colorida de la edición tenía que abandonar el taller mientras el resto de participantes celebraban que ya eran finalistas.