Era esta misma semana cuando se conocía que finalmente sería La 1 la cadena que emitiría la final de la Copa del Rey de fútbol el próximo sábado 21 de abril. La televisión pública habría pagado un total de 3,5 millones de euros por este único encuentro después de que varias cadenas privadas se hayan interesado por el partido.
¿Por qué es un despropósito esta decisión desde la televisión pública? Desde TVE siempre se han quejado de que les falta dinero para hacer una programación interesante durante todo el año y, sin embargo, son capaces de gastarse esta suma de dinero en un encuentro que sólo dura 90 minutos.
En caso de que ninguna cadena de televisión quiera emitir dicho encuentro, cosa que no ocurre en ningún caso, TVE sí que tendría que actuar con el fin de que los espectadores puedan disfrutar del deporte. Sin embargo, en este caso, Mediaset España ya había mostrado su interés por estos derechos. Pero parece que TVE estaba dispuesta a pagar más.
El grupo dirigido por Paolo Vasile criticó públicamente, a través de un comunicado y de sus informativos, el reducido plazo que la Federación había dado para la subasta. Además, Competencia ya había indicado que el primer pliego de las condiciones no se ajustaba a la normativa vigente.
En menos de dos semanas, la RFEF ha reformulado su oferta y ha lanzado la puja que ha sido ganada por RTVE de manera exprés. La temporada pasada, la Federación de Fútbol unió la final de la Copa a los partidos amistosos de la selección, un paquete que se quedó Mediaset. Este año, la UEFA ha acabado con los amistosos tras crear la Liga de Naciones, un torneo que se ha adjudicado en España a TVE. Esto ha obligado a buscar nuevas fórmulas.
Para comparar lo que suponen esos 3,5 millones de euros que TVE ha decidido invertir en un partido de fútbol habría que compararlo con otras producciones de la cadena. Supone casi el precio de la mitad de toda una edición de MasterChef o la producción de seis episodios de Cuéntame cómo pasó. Un tiempo de producción que se alargaría durante un mes y medio y que ahora quedarán fulminados en apenas 90 minutos de tiempo de juego.
¿Fútbol o Eurovisión?
Esta compra se puede comparar, como muchas veces se ha hecho, con Eurovisión. Y que se trata de un evento de una sola noche en el que se invierten grandes cantidades de dinero. Y, sin embargo, su repercusión en bien distinta.
Eurovision se juega todo en una noche. Se trata del evento no deportivo más visto de la televisión cada año y el programa de televisión más comentado en redes sociales. Pero, más allá de eso, Eurovisión le concede a la web de RTVE su mejor resultado de visitas y le da contenidos durante meses a toda la Corporación pública.
Sin embargo, poco jugo podrá sacar TVE de una final de la Copa del Rey más allá del dato de audiencia conseguido en esa noche. El encuentro no tendrá más repercusión y la cadena no podrá sacar más contenidos exclusivos del encuentro. Y es que al final todo se resume en esto: en el dato de audiencia que TVE quiere conseguir a golpe de talonario para mejorar su dato de abril.
La pública mantiene en este mes un 10,5% de cuota de pantalla. Vuelve a perder fuerza después de haber conseguido recuperarse en los primeros meses del año gracias a Operación Triunfo. Y este partido le puede volver a colocar en una buena posición. Eso sí, se dejará 3,5 millones de euros por el camino. Un acto que jamás debería ser consentido para una televisión pública que no está pensando en la salud de la Corporación.