Jorge Javier Vázquez se trabó la primera vez que pronunció Sálvame delante de una cámara de televisión. Por aquel entonces, el público no estaba tan familiarizado con esta palabra. Ni en Telecinco ni en La fábrica de la tele sabían lo que estaban a punto de estrenar aquel marzo de 2009. Ahora Sálvame es una forma de hacer televisión.
“Sálvame es el único programa que no querrían que se emitiera los supervivientes”, decía Jorge Javier Vázquez en aquel momento para presentar el formato. Y es que Sálvame nació, nada más y nada menos, que como un simple debate nocturno de Supervivientes. Casualmente, en aquel momento era Jesús Vázquez el que presentaba el reality que más tarde acabaría presentando el propio Jorge Javier.
Telecinco le concedía a La fábrica de la tele, participada por Mediaset España, la producción de este espacio después de retirar producciones como Aquí hay tomate, Las gafas de Argelino o EL puzzle blanco. Sólo con La noria entre sus manos, este nuevo Sálvame se convertía en su nuevo intento para destacar en la programación de Telecinco.
En este primer Sálvame se estrenaron Rosa Benito, Kiko Hernández, Belén Esteban, Karmele Marchante, Jimmy Jiménez Arnau y Nuria Bermúdez. Ellos fueron los que abrieron aquella ventana por primera vez en la historia, sin saber que estaban inventándose por el camino una nueva forma de hacer televisión.
Este viernes se cumplen nueve años de aquel momento en el que Sálvame se instalaba en la tarde de Telecinco
Los datos conseguidos por este denominado Sálvame Golfo hizo que Telecinco tomase una decisión sin apenas precedentes: Sálvame se convertiría en formato diario y se estrenaría en la sobremesa el 27 de abril de 2009. Este viernes se cumplen nueve años de aquel momento en el que Sálvame se instalaría en la tarde de Telecinco y supondría una gran revolución para el mundo del corazón.
Y así es como Jorge Javier Vázquez aparecería por primera vez en la tarde de Telecinco tras haber finalizado El tomate. Con un plató bastante más oscuro al que ahora estamos acostumbrados, Sálvame diario llego para quedarse. “Me hace muchísima ilusión estar de nuevo con ustedes a esta hora”, dijo Jorge Javier en el estreno. “Venimos con la idea de quedarnos muchísimo tiempo. De aquí a la eternidad.”, aseguraba el presentador, casi augurando lo que estaba por llegar.
Aquella versión diaria tenía muy poco que ver con lo que hoy en día vemos en la televisión cada día. Apenas cuatro colaboradores se sentaban en la mesa diaria: Kiko Hernández, Jimmy Jiménez Arnau, Begoña Alonso, ex de Bustamante, y Karmele Marchante. Mantenían un debate muy serio sobre Supervivientes y otros temas de corazón que poco a poco se fue conociendo a sí mismo, saltándose sus propias reglas y volviéndose más alocado. Y así se iría transformando en el Sálvame que todos conocemos hoy en día.
Un cambio en el mundo del corazón
Por el camino, lleno de numerosas polémicas, Sálvame ha reventado el mundo del corazón. Y es que es en Sálvame donde se decide quién es personaje y quién no lo es. Sálvame marca la agenda. Por eso ellos mismos se han convertido en los personajes más importantes del mundo del corazón, pasando de ser entrevistadores a entrevistados en numerosas ocasiones.
La consecuencia ha sido clara: el hecho de que Sálvame se haya quedado con el monopolio del mundo del corazón ha producido que los cachés hayan bajado de forma muy notable. Y es que la enemistad entre ¿Dónde estás corazón? y Sálvame Deluxe hizo que se pagaran los mayores cachés conocidos en este mundo. Una vez terminaron con la vida del programa de Antena 3, Sálvame era el que tenía la correa agarrada por la mano y decide la actualidad del día.
Abren las puertas a nuevos contenidos
Nueve años son muchos, y por eso Sálvame se ha tenido que ir renovando para no morir. En estos últimos meses han dado la bienvenida a nuevos colaboradores, más jóvenes, para intentar renovar su plantel de protagonistas. Pero, además, el programa ha dado cabida a temas mucho más serios para la sociedad.
Prueba de ello fue lo que hicieron el pasado mes de marzo, cuando hicieron varios monográficos sobre el Caso Gabriel con una mesa mucho más periodística. Además, esta semana también han comentado la sentencia de La Manada o el caso del robo de Cifuentes y su posterior dimisión.
Su mejor audiencia desde 2015
Parece que los años no pasan por Sálvame y los cambios están haciendo su efecto. Y es que el programa pasa por su mejor momento en estos últimos años. Mantiene en estos nueve años un promedio del 17,1% de cuota de pantalla y 1.857.000 espectadores. Pero su evolución ascendente en la presente temporada ha hecho que alcance en abril un destacado 18,1% de share (1.928.000 espectadores), su mejor dato mensual desde febrero de 2015.