Kiko Hernández es el único de los colaboradores de Sálvame que lleva pinganillo, un auricular para seguir instrucciones de la dirección del programa. Algo que a veces ha levantado suspicacias por parte de algunos de sus compañeros o de algún que otro enemigo del madrileño.
De ahí que este jueves, al volver a salir el tema durante el programa, Hernández haya explotado contra sus críticos. "Hay mucho torpe y maicioso como Toño Sanchís que dicen que no sirvo para nada y sólo sirvo para retransmitir lo que me dicen por aquí. Yo me curro mis noticias, mis bombazos... Hasta el peor de mis momentos doy el callo".
"A todos los payasos, inútiles, ineptos, que os han dado la oportunidad. A muchos os han puesto este micrófono y esta petaca, pero no servís. Los que estamos aquí desde hace nueve años sí servimos con pinganillo y sin pinganillo. Y líderes de audiencia", añadía.
"Como dice la Pantoja, ¡no tenéis vida! Estáis muertos de envidia porque ocupamos una silla aquí".