Cualquiera que haya leído La química del odio, la última novela de la periodista Carme Chaparro, pensó en ésta cuando este martes aparecía la noticia de que habían encontrado encontrado un cadáver en el hueco de un ascensor del Hospital La Paz tras varios días de fuerte olor.

Y es que, en esta novela continuación de No soy un monstruo, hay un pasaje en el que unos técnicos encuentran un cadáver en el hueco del ascensor de un hospital. De ahí que ayer la periodista no parara de recibir mensajes.

"Estaba conduciendo y no paraban de entrarme mensajes en el móvil. He aparcado y ya he visto las capturas de pantalla. Me he quedado blanca", ha dicho la presentadora de Noticias Cuatro a Outdoor.

Chaparro, que no quiere frivolizar con el tema y dar sus condolencias a los familiares del fallecido, ha contado que se basó en un accidente que había ocurrido en el hospital de Bellvitge en el año 89 para escribirlo en la novela.