En Telecinco, el tema del franquismo y el traslado de los restos de Francisco Franco del Valle de los Caídos es un tema que se trata casi en cualquier programa, ya sea El programa del verano, Ya es mediodía o Sálvame.
Este viernes, Sonsoles Ónega ha conectado en directo con María Severiano, de la asociación Movimiento por España, quien se presentó ante las cámaras con una imagen de la Virgen María en sus brazos.
La mujer explicó que si aparece con la figura es porque viajó a Naju, en Corea, y allí “fui a pedirle a la Santísima Virgen que se está apareciendo allí que protegiera el Valle de los Caídos y a España de la apostasía, la herejía, y todo lo que está pasando, y la recuperación de la fe en España”.
Unas palabras que asombraron a la presentadora y preguntó que por qué creía que había apostasía y herejía en España, y que si realmente estábamos tan mal. Una cuestión que permitió a la invitada destilar una gran homofobia.
"Amamos a los homosexuales, pero irán al infierno"
“El pecado está completamente corrompiendo a la juventud, nadie habla de pecado, nadie habla de infierno, y a los homosexuales se les dice que es normal que sean homosexuales. Sin embargo, Sodoma y Gomorra fue borrada de la tierra de la faz de la tierra por la sodomía, que es la homosexualidad”afirmó la invitada. Para que su mensaje no pareciese que incita al odio, aclaró que “amamos a los homosexuales, pero les tenemos que informar de que se van al infierno”.
Además, también dijo palabras cargadas de racismo, como cuando se refirió como “chusma” a los inmigrantes, que hizo que Ónega le pidiese que no usase esas palabras, y que no era necesario siquiera que los llamase hijos de Dios, que con la palabra personas era más que suficiente.