Desde la pasada semana en Sálvame tienen abierta una nueva trama en la que el eje es una de sus colaboradoras: Gema López. Algo llamativo porque, hasta ahora, Gema era (y en realidad sigue siendo) esa gran desconocida de la que no sabemos nada en su faceta privada, que nunca se ha convertido en un personaje que genere noticias por sus idas y venidas.
Todo comenzó porque María Lapiedra dijo en una publicación que Gustavo González le habló sobre la separación de Gema y un supuesto “lío” con un compañero de trabajo, del que nada más se sabe. Desde el primer momento Gema se negó a responder a María, y casi también a dirigirle la palabra a González, quien asumió su responsabilidad por irse de la lengua pero señalado que nunca pretendía que eso se divulgase.
Este lunes, de hecho, se volvió a hablar del tema, y en un intento de reconciliación, Gustavo enfatizó cómo “Gema López se ha ganado ese respeto, de que no se hable de su vida privada, y si en algún momento directa o indirectamente he transgredido eso me gustaría ofrecerle esas explicaciones”.
El respeto que otros han perdido
Gema López no estaba por la labor de perdonar a Gustavo y su discurso fue breve y sucinto. “No voy a llenar de gasolina motores ajenos, cada uno que curre, que se busque la vida. Mi sitio sigue siendo el mismo, yo creo que me he ganado el respeto, y otros lo han perdido”.
Enfatizó que sabía de la existencia de esos rumores, que en ningún momento se confirmaron, y dejó claro cuál es su lugar en el programa. “No voy a hacer un espectáculo de esto” le decía Gustavo. “La que no lo estoy haciendo yo, porque me protejo, porque me quiero y porque de los míos cuido yo. Así que digan, que cuente, que rumoreen. que aquí me quedo”, señalando que ni siquiera va a decir cosas a su propio favor.
Por qué no veremos a Gema López en un ‘Deluxe’
Muchos han sido los colaboradores de Sálvame que alguna vez se han sentado en el sillón del Deluxe para hablar de su vida privada. La Esteban con sus clásicos belenazos, que suelen ser un boom en audiencia. Terelu Campos, con sus desamores, sus problemas de salud o de dinero. Chelo García Cortés, que destapó detalles de su amistad especial con Bárbara Rey. El propio Gustavo, cuando se descubrió su relación con María Lapiedra. Por no hablar de otros colaboradores por así decirlo menores o temporales, como María Jesús Ruiz o Mónica Hoyos, o estrellas del pasado de Sálvame como Rosa Benito o Raquel Bollo.
Sin embargo, Gema ha dejado claro cuál es su lugar en el programa: el lado de los colaboradores, porque ella es periodista, comentarista, incluso una show-woman que sale a plató disfrazada de la Duquesa de Alba del cuadro de Goya si la ocasión lo requiere.
Y que su trabajo no es en el sillón de los invitados, que no aclarará nada en un Deluxe, no es una estrella con ganas de focos ni de protagonismo. Además, ha demostrado que en Sálvame pueden hablar de tu vida y no pasa nada si sabes no entrar al trapo, a la vez que ha demostrado ser un ejemplo de profesionalidad que no ha abandonado el plató de manera dramática cuando se ha hablado del tema. El circo, las lágrimas, los dramas, para los otros, para el que lo quiera.