Pedro Almodóvar estrena estos días Dolor y Gloria, su película número 21. El cineasta manchego es un ejemplo de que en España los sueños se pueden cumplir si se quiere, y el haber nacido en un pequeño pueblo de La Mancha y que tengas un trabajo fijo en Telefónica no es impedimento alguno para llegar a Hollywood si de verdad te lo propones.
La televisión siempre ha tenido impacto en las películas de Almodóvar. Era un electrodoméstico ya presente en Pepi, Lucy, Bom y otras chicas del montón que ofrece familiaridad al espectador a la vez que nos ha ofrecido información de los personajes, cuando no, directamente a los personajes.
Y lo interesante es que el cineasta no solo ha retratado de forma ácida los contenidos de la pequeña pantalla, sino que a veces, se ha adelantado a lo que estaba por venir.
Cómo ‘Kika’ previó las crónicas de sucesos
Hace unas semanas, el pequeño Julen cayó a un poco en Totalán, Málaga, y las televisiones dieron una cobertura exagerada sobre su rescate, cayendo en el sensacionalismo y la lágrima fácil, en prácticas pseudoinformativas, con el informar minuto a minuto de todo, con la excusa de estar al pie de la noticia.
Algo que ya hizo Andrea Caracortada, interpretada por Victoria Abril, en Kika. Andrea era una reportera que presenta un espacio llamado ‘Lo peor del día’, patrocinado por una marca de leche, que recoge crímenes, violaciones y todo tipo de historias truculentas. Ella es capaz de grabar con su cámara un crimen, está compinchada con la policía para que la avisen cuando haya una violación, se salta cualquier código con tal de ser la primera en informar.
En el libro ‘Un cine visceral’, Almodóvar le contaba a Frédéric Strauss cómo se inspiró el la televisión norteamericana para este personaje, sobre todo, en programas de juicios, en los que todo adquiría un toque moral y de escarmiento. “Cuando escribí el guión de Kika, que empecé hace dos años, no existían todavía lo reality show en España, han venido este año”, explicaba Pedro.
Kika se estrenó en octubre de 1993, un año en el que vimos como espectadores, por ejemplo, cómo Antena 3 y TVE realizaron en directo sendos programas desde Alcasser el día que se encontró sin vida el cuerpo de Míriam, Toñi y Desirée, tres adolescentes desaparecidas unos meses atrás. “Lo que yo denuncio con su con el personaje de Andrea no es ya la televisión en sí misma, sino su capacidad de corrupción: sugiere un tipo de iniciativas terribles en el individuo. En este caso además del voyeurismo, del placer de disfrutar con las desgracias de los demás, hay algo de espionaje, una actitud policial, de denuncia del vecino, que es terrible” añadía al respecto.
La tele, el germen de 'Tacones Lejanos'
Antes de Kika, en Tacones Lejanos, la Abril ya hacía de rostro televisivo: es Rebeca, presentadora de informativos, y en un momento dado, ella misma habla del asesinato de su marido, para revelar que fue ella quien cometió el crimen en pleno directo, desde plató, mientras su compañera lo traduce a lenguaje de signos. Esa escena fue el germen de toda la película, ya que el propio director y guionista “siempre había soñado verla en un telediario, y como no la vi, la desarrollé”.
También podemos recordar Matador, y cómo Asumpta Serna da vida a una abogada a la que todos los medios critican por defender a un hombre acusado de violación, al que daba vida Banderas. Algo que a muchos podría recordar a La Manada y su mediático abogado, que raro es la semana en la que no le vemos un rato por televisión.
‘Sálvame’ antes de los tiempos de ‘Sálvame’
El mundo del corazón y el salseo catódico también está reflejado en el cine de Almodóvar, ya desde La Ley del Deseo, en el que Rossy de Palma (acreditada entonces como Rossy Von Donna) entrevista a Eusebio Poncela, un director de éxito, y centra sus preguntas en qué le gusta en la cama y en el amor, qué busca en una pareja. Una pregunta que bien podría hacerse en el Deluxe cuando trae a grandes invitados. En el caso de la película, la información que revelaba era utilizada por su amante para convertirse en la pareja perfecta.
Claro que, para gran programa de corazón, el que se ve en Hable con ella, con Loles León como na presentadora que entrevista a Lidia (Rosario Flores) que da vida a una torera cuya expareja también es matador de toros. Como Rosario no quiere que le pregunte por su currículo amoroso, Loles estalla y se queja de que ella no pacta las preguntas, que ella hace vivo, lo que provoca que Lidia acabe levantándose y abandonando el programa, algo a lo que hasta entonces no estábamos tan acostumbrados. Ahora, en Sálvame, rara es la tarde en la que alguien no se enfada y se va.
Igualmente, retrató la incomodidad que da ser famoso y salir por televisión, algo de lo que se quejan a menudo en el programa de Telecinco. Y como muestra, está el personaje de Pepa (Maura) en Mujeres al borde de un ataque de nervios, que el día que descubre que está embarazada y que su pareja le abandona le piden que firme unos autógrafos por salir por televisión en un anuncio, a pesar de que esté llorando como una magdalena.
¿Se inspiró en Emma García para ‘Volver’?
Si uno se dedica a leer los guiones de Pedro Almodóvar puede masticar detalles que de otra manera podrían perderse. Así, por ejemplo, en Volver habla de una presentadora cuya descripción bien podría encajar con la de Emma García en la etapa de A tu lado, pues la describe como una “presentadora típica, desenvuelta, rubia ligeramente ‘atirabuzonada’, de sonrisa automática y pétrea”.
Esa presentadora estaba al cargo de un programa de testimonios (tal como era A tu lado en su primera etapa) y tiene como invitada a Agustina (Blanca Portillo), que no puede salir del plató sin hablar de su cáncer y de un trapo sucio referido a una vecina. Seguro que muchos recuerdan aquella secuencia que finalmente interpretó Yolanda Ramos. “Agustina tiene cáncer. Agustina, tienes cáncer. No estés asustada, estás entre amigos. A ver, un aplauso para Agustina”.
Rosa María Mateo fue Chica Almodóvar
A Almodóvar también le ha gustado denunciar la poca profesionalidad que a veces se percibe en la televisión, los intrusos. Por ejemplo, en Kika precisamente, veíamos una presentadora (encarnada por su propia madre) que estaba al frente de un programa de libros, pero ella no leía porque no veía bien, y admitía no saber de qué trataba la obra del entrevistado que tenía frente a sí ese día.
Además, no debemos olvidar que la televisión nos manda mensajes sobre los personajes, recreándose en su drama. Como muestra, tenemos ¿Qué he hecho yo para merecer esto!, en la que Gloria (Carmen Maura) no puede ver la tele mientras cena, pero están dando un programa sobre anticonceptivos, señal de lo harta que está ella de su familia. Además, más tarde hará el amor sin ganas algunas con su marido mientras en la tele el propio Almodóvar hace un playback de 'La Bien Pagá', canción que bien podría describir la historia de aquel ama de casa desgraciada.
Como broche para este reportaje, hay que volver a hablar de Matador, en la que nos encontramos a una colaboración televisiva de lujo. En un momento dado, una locutora habla del eclipse que se producirá ese día y cómo afectará a la población, un papel que interpretó Rosa María Mateo, la actual administradora única de Televisión Española y que, a modo de cameo, se convirtió en una más de las legendarias Chicas Almodóvar.