Este sábado a partir de las 22,05 , Televisión Española dice adiós a Prodigios, el talent show musical producido por RTVE en colaboración con Shine Iberia, que supone una ruptura con otros formatos similares, al haber unido el entretenimiento con disciplinas artísticas clásicas a través de 27 jóvenes entre 10 y 16 años.
Prodigios es un buen ejemplo de lo que debe ser la televisión pública. Ha ayudado a que el espectador se quite los prejuicios que pudiera tener sobre la música clásica, el canto o la danza y ha ofrecido un producto entretenido y enriquecedor que se ganó el aplaudo en las redes sociales desde la primera entrega.
Además ha servido de plataforma para niños que no tienen fácil poder dedicarse a la música, y ha contado con un exquisito jurado formado por Ainhoa Arteta, Andrés Salado y Nacho Duato, quienes no solo aportaban su sus opiniones sino que enseñaban con cada una de sus valoraciones.
Lo que no consiguió 'OT 2018'
El formato ha enganchado al espectador, y en ocasiones ha llegado a hacer sombra al Deluxe con su audiencia. Y es que el programa lograba emocionar, transmitir el amor de unos jóvenes por la música.
Un punto diametralmente opuesto por ejemplo a los participantes de la última edición de Operación Triunfo, que con unos cuantos años más venían ya resabiados y en busca del like, pensando en la gira tras el programa y no en enriquecerse del paso por el mismo.
Prodigios manifiesta que existen nuevas generaciones con esa especial sensibilidad, que la música puede ser realmente una pasión.
De ‘Menudo show’ al futuro ‘Idol Kids’
Talent shows infantiles ha habido en España desde hace décadas, especialmente desde el nacimiento de las televisiones privadas. Uno de los formatos pioneros en Antena 3 fue quizá Menudo show, y eso que entonces los niños solo tenían que hacer un lipsync de su artista favorito y moverse como él, ya fuese Rocío Jurado o Michael Jackson.
Aquella aventura funcionó tan bien que se dio un paso más y se hizo Menudas estrellas, donde los niños ya cantaban con su voz. De estos formatos salieron figuras de la televisión actual como Lorena Gómez, Adrián Rodríguez o Lara Álvarez, que imitó a Janet Jackson. Más tarde llegarían otros programas de éxito como Eurojunior, La voz kids o Tu cara me suena mini, y algunos de los que ya es difícil acordarse como Quiero cantar, emitido por Antena 3 en 2010.
Tampoco podemos olvidar los talent shows infantiles que puso en danza Teresa Rabal a lo largo de los 90: La guardería, en Antena 3, en el que un grupo de jóvenes cantantes bautizados como el Superclan competían por alzarse como el grupo favorito cada semana a través de votos por carta. En las televisiones autonómicas ofreció Veo, veo, en la que el premio eran becas de formación artística y donde podía participar cualquier niño con talento para cantar, bailar o lo que viese oportuno.
Teresa Rabal también al frente de un certamen internacional, Bravo Bravísimo, emitido por Telecinco, donde participó de niña Tamara, la cantante de boleros, y que ganó Antonio Rayo, Rayito, un niño hijo de padre gitano y madre asiática y que tocaba la guitarra de manera espectacular. Rayito siguió dedicándose a la música, y ha sido autor de ‘Madre tierra’ de Chayanne o ‘La mordidita’ de Ricky Martin. También ha compuesto para Malú, David Bisbal, David Bustamante o Shayla Dúrcal, y fue coautor de ‘Do it for your lover’, el tema de Manel Navarro en Eurovisión.
Mirando al futuro, podemos saber que Telecinco prepara un nuevo talent infantil, Idols Kids, y que contará con Isabel Pantoja como jurado. Un programa del que se llegó a anunciar sus castings y que iba a estar presentado por Jesús Vázquez para después ser paralizado, si bien el fichaje de la tonadillera por Mediaset ha servido para volver a ponerlo en macha.