RTVE anunciaba por enésima vez esta semana que la Academia de Operación Triunfo abrirá sus puertas en los próximos meses, aunque en esta ocasión adelantaba que muy pronto contarían novedades sobre la nueva edición del talent musical de Gestmusic.
Teniendo en cuenta los actuales consumos televisivos, las audiencias de La 1 de TVE y, tras dejar descansar el formato un tiempo -se supone que volverá en el primer trimestre de 2020-, la idea parece bastante acertada ya que OT puede ser un formato con un gran valor cultural y social.
'Operación Triunfo' llegará en 2020
El hecho de que el programa no vaya a llegar hasta 2020 hace impensable que pueda ser elegido nuevamente por la cadena pública como el método para elegir a nuestro representante en el próximo Festival de Eurovisión.
Sin embargo, no está de más advertir a la cadena pública que OT debe estar lo más lejos posible del certamen musical. El programa ya ha cumplido con su misión de atraer a nuevos espectadores a Eurovisión y es hora de optar por otras opciones, sobre todo teniendo en cuenta el buen sabor de boca que dejó el trabajo de la delegación española en Tel Aviv.
Como ya hemos dicho más de una vez, TVE debe seguir el paso de países como Francia para elegir a su representante en este importante evento. Es decir, escoger a su representante a dedo durante un tiempo prudencial para después poder levantar una sobresaliente preselección.
Atraer a reputados compositores y cantantes
Sólo así se conseguirá atraer a importantes compositores y cantantes tras años y años de desconfianza en la cadena pública. Sólo así nuestro país puede tener opción de acabar con ese deshonor de ser el país que más tiempo lleva sin ganar Eurovisión.
España ha demostrado tener mucho potencial musical a nivel internacional. No hace falta que hablemos una vez más de Rosalía o Álvaro Soler. Ahora sólo es cuestión de que los responsables de la cadena pública trabajen desde ya en una propuesta cerrada, profesional, arriesgada.
Una propuesta que no sólo ilusione a los españoles, sino también a los europeos. Una propuesta a la altura de nuestros vecinos portugueses o de Italia, el país del Big Five con mejor currículum desde su vuelta al certamen allá por 2011.
Que España vuelva a ganar Eurovisión no es ninguna utopía. Sólo es cuestión de que en TVE haya una persona que realmente lo crea y que trabaje a conciencia en ello. Profesionales hay de sobra. Crucemos los dedos para que el nuevo equipo directivo sepa verlo. La Marca España sigue en juego.