Dakota fue señalada como violenta en la gala de Supervivientes de este jueves, y durante parte de la noche fue aislada de sus compañeros. Colate aseguraba que fue a cocinar un pescado y que entonces Dakota le dio un empujón, porque no quería que cocinase. Colate se quejó entonces de una agresión, de haber sido empujado hacia las llamas. Fabio arrojó algo de luz al conflicto: Colate había pescado y quería quedárselo para él y cocinar para sí mismo, lo que provocó indignación en el grupo.
Así, el programa empezó con lo que parecía un juicio a Dakota. Sola, mirando a cámara, la joven lloraba y juraba por su difunto hermano que no le ha pegado a Colate, mientras el programa buscaba las imágenes de la pelea para tomar una decisión.
“Yo estoy mal porque la verdad es que no le agredido en ningún momento. Le he dicho que no se hacía el pescado porque he jurado por mi hermano y el por sus narices que lo hacía, y Albert se ha puesto conmigo también”, decía la joven.
“No le he pegado, se ha tirado al suelo”
Ella protestaba por la actitud de Vallejo-Nájera porque “aquí se comparte todo y ha llegado y no quería compartirlo. Te lo juro que no le he pegado. Se ha tirado al suelo. Estoy mal, no le he hecho nada. Soy la primera que si le he agredido pido perdón”, continuaba entre lágrimas.
Avanzada la gala, Jorge Javier Vázquez anunciaba que “tras el visionado el visionado de las imágenes del enfrentamiento de Dakota y Colate, la organización no aprecia una agresión violenta de Dakota. Hay un forcejeo entre ambos previo, durante y posterior a la caída”.
“No se pueden llegar a ciertos extremos, Dakota, ni físicos ni verbales. La organización te pide por favor que evites determinados comentarios”, programa el presentador a la concursante.
¿Es incómoda Dakota para el concurso?
La actitud de Dakota no está bien, pero de nuevo vemos la doble vara de medir el programa según se juzgue a unos concursantes u otros. Semanas atrás, por ejemplo, vimos a Violeta insultar a Carlos Lozano y tirarle arena, o perseguirle con un machete, pero no fue separada del grupo, ni se le pidió, como a la de Hermano Mayor, que evite actitudes y comentarios.
Y es que da la casualidad que Dakota está convirtiéndose en una concursante incómoda para Supervivientes, porque no se calla una, y en general, sin que le falte razón para hacerlo. Por ejemplo, vimos cómo el domingo protestó ante Jordi González. “No entiendo por qué yo he estado solo 20 minutos con mi padre y ellos han podido pasar la noche juntos, y encima con comida. ¡Esto no es normal!”, decía, ante el hecho de que Omar Montes e Isabel Pantoja tuvieran mejores condiciones para recibir una visita familiar. Además, protestaba que su padre hizo “el mismo camino que ellos” para ir a visitarla, pero con menos tiempo. Jordi se limitó a decir que todos eran iguales y cambió pronto de tema.
Dakota también se quejó semanas atrás de que la tonadillera recibiera una llamada una gala de jueves y los demás no. “Ella es Isabel Pantoja. Cuando entraste en este concurso ya sabías cuáles eran las condiciones. Esto es televisión, ya deberías de saber cómo funciona” respondía entonces Jorge Javier Vázquez, dejando claro un cierto favoritismo hacia la de ‘Marineo de luces’.
La joven presume de decir lo que todos sus compañeros piensan y ninguno se atreve a decir, y ciertamente razón no le falta. No obstante, pone a la organización en aprietos en directo, dejando a los presentadores sin respuesta, o haciéndoles responder algo que no procede del todo.
Así, lo vivido anoche se puede considerar un toque de atención a Dakota, y que si sigue igual de guerrera con sus compañeros y sobre todo con la organización lo mismo termina con una expulsión disciplinaria, o vete a saber con qué historia nos podrían sorprender para castigarla.
De todas formas, Dakota también debía ser más consciente de que hace tiempo que Telecinco dejó claro que los realities con famosos tienen sus propias normas, que se puede cuidar con más cariño a unos concursantes que a otros. Que lo que para uno supone una sanción, para otros se hace la vista gorda.