Antena 3 estrena esta noche, a partir de las 22:45 horas, El Nudo, su último thriller en colaboración con Diagonal (Matadero). Una serie con la que Atresmedia se jugó mucho hace ahora un año puesto que era su carta de presentación en la televisión de pago.
De ahí la importancia de que dejara un muy buen sabor de boca a los abonados de ATRESplayer PREMIUM puesto que, en un principio, esta ficción sólo se iba a poder consumir de forma exclusiva en el pago.
Y lo hizo. ¡Vaya sí lo hizo! Un poco mezcla entre The Affair, El Embarcadero y Big Little Lies, El Nudo engancha desde el minuto cero y te deja con ganas de más tras sus primeros y adictivos cincuenta minutos. Puro binge watching de fin de semana.
La clave principal de su éxito está en su forma de ser narrada, completamente alejada de la serie original argentina Amar después de amar y su versión mexicana Caer en tentación, lo que da mucho más valor a esta adaptación.
Y es que en El Nudo nos van contando la historia en dos tiempos y a través de testimonios a cámara al estilo no tanto de la citada Big Little Lies o Élite, sino de Modern Family.
Es decir, sus personajes miran de tú a tú al espectador en un brillante juego de compenetración que hace que la inmersión en la ficción sea total.
Obviamente la nueva serie de Antena 3 y Diagonal no cuenta con el humor de la ficción de la familia Prichett. Sin embargo sí que presenta un tono ligero -sin llegar a una Scandal o Ingobernable- que hace que no estemos ante un thriller trascendental más, sino ante algo más liviano que hace que el espectador se enganche.
Un punto de inflexión para Verbeke
La otra clave de su éxito se encuentra sin ninguna duda en sus actores, que han conseguido una gran química entre ellos. No obstante, es justo resaltar el trabajo de Natalia Verbeke que marca sin duda un antes y un después en su carrera.
Tampoco hay que olvidar resaltar lo acertado de la estrategia de Atresmedia de recortar sus series a 50 minutos. Y es que de haber sido una ficción de 70 minutos hubiéramos tenido que tragarnos cientos de subtramas paralelas que no aportarían nada a la historia.