Cada vez que abre la boca, sube el pan. Desde su salida de TVE en 2016 se ha centrado en la escritura de su última novela, La Maestra, y en su nuevo programa en Canal Sur, 5C. Mariló Montero atraviesa una etapa profesional alejada del foco mediático nacional, un nuevo periodo en su vida que no ha rebajado esa verborrea espontánea y sin filtros que tanto la caracterizan.
En una entrevista publicada por El Español el pasado domingo, la periodista Navarra se moja en cuanto a cuestiones políticas y deja claro a quién le gustaría ver en la Moncloa: Inés Arrimadas. Montero asegura estar muy pendiente de las negociaciones de cara a la investidura y afirma que ni el actual presidente en funciones, Pedro Sánchez, ni Pablo Casado, y tampoco Santiago Abascal están a la altura del cargo.
“Yo veo mucho más presidenta a Inés Arrimadas. Sin duda. Es una oradora y una opositora fantástica”, indico la comunicadora, a quién también le agrada Cayetana Álvarez de Toledo, portavoz en el Congreso de los Diputado por Partido Popular.
Mariló, que expuso las dudas que le provoca el ideario de VOX, sobre todo en cuestiones de la comunidad LGTBI y el uso de armas, sí que aplaudió planteamientos menos extremos del partido verde: “Por ejemplo, me parece bien lo de la las clases de caza en los colegios”.
Hubo tiempo durante la charla para referirse a Pablo Iglesias, al que interpuso una denuncia en 2016 ante el Instituto de la Mujer por unas declaraciones en las que el líder de Podemos afirmó que “azotaría” a la periodista hasta que sangrase.
Preguntada por una posible disculpa del político, Montero confirmó que jamás recibió una justificación personal del líder de la agrupación morada y recordó aquellas desafortunadas palabras a las votantes del partido.
“A otro le hubieran linchado por decir eso. La extrema izquierda maneja muy bien los linchamientos y las redes sociales”, manifestó y advirtió que aquel desencuentro no le ha excluido de su lista de invitados al espacio de la autonómica andaluza. “Iglesias no encarnaría el gobierno del insomnio, sino el de la bomba atómica”, sentenció.
En la conversación también hubo tiempo para hablar del acoso machista, que aseguró hacer sentido de manera continuada y generalizada, sobre todo en las redes sociales. “Cada ve que me ven por la tele, muchos hablan de Herrera. Es como si Carlos hubiera estudiado mi carrera y me dijera lo que tengo que contar y preguntar. Es un machismo repugnante”, lamenta la escritora.