Jason Ralph es Quentin Coldwater en 'The Magicians' (Syfy)

Jason Ralph es Quentin Coldwater en 'The Magicians' (Syfy)

Televisión

'The Magicians', la reinvención de 'Harry Potter' en la universidad

15 febrero, 2020 19:04

Syfy tiene ante sí una de sus apuestas más prometedoras de los últimos años. La cadena estrena el próximo 3 de febrero en prime time The Magicians, una ficción que respira una grandeza que en otras ocasiones se ha echado en falta.

La nueva serie es una suerte de reinvención de la saga Harry Potter con un tono mucho más adulto. En lugar del conocido mago de la cicatriz, el protagonista es Quentin Coldwater, un joven que también descubre que tiene poderes pero a una edad algo más avanzada.

Quentin no va al colegio Howarts, pero aprende lo mismo que Potter. En esta ocasión, el centro de operaciones es la escuela Brakebills, una universidad de magia en la que también los alumnos se dividen en distintos grupos, aunque la segmentación no la hace un "sombrero seleccionador" sino el tipo de habilidades que cada uno de ellos tiene: psíquicos, ilusionistas, etc.

'The Magicians' es una suerte de reinvención de la saga Harry Potter con un tono mucho más adulto

E incluso tiene un villano innombrable al que se conoce como "la bestia". Aunque su aspecto dista mucho del de Voldemort, consigue el mismo efecto aterrador entre los personajes y la audiencia.

La magia tiene más visiones

Aunque la estructura es muy parecida, las tramas que resultan con estos cambios hacen que el resultado definitivo sea distinto del de Harry Potter. Los espectadores que disfrutaron de las novelas de J.K. Rowling y las posteriores películas podrán hacerlo también con The Magicians sin pensar que están viendo de nuevo lo mismo.

La serie de Syfy tiene un tono mucho más maduro y, aunque la fantasía está igualmente presente, la aborda de un modo muy distinto. Brakebills huele muy diferente de Hogwarts y se acerca más a una universidad normal de Nueva York, ciudad en la que sucede la serie, que al edificio medieval que dirigía Dumbledore.

Pero quizá la gran diferencia entre ambas series es la edad de sus personajes. Harry Potter, Hermione Granger y Ron Weasley estaban más centrados, al menos en sus primeros años, en escobas voladoras, golosinas y animales domésticos. Muy lejos de aquello quedan Quentin y compañía, que están mucho más centrados en las relaciones sociales, parejas o incluso en el sexo.

Una serie con trama propia

Pero lo realmente importante es la trama que subyace dentro de todos estos pilares. Y ahí es donde más cumple The Magicians. La ficción va "in crescendo" en la presentación de su trama argumental centrándose primero en los personajes principales, más tarde en la escuela y finalmente en los enemigos, dejando un dulce sabor al final de su piloto que hace seguir con ganas de continuar viéndola.

The Magicians funciona en su conjunto, lo que hace que se desmarque de todas las posibles comparaciones y marca una historia totalmente compatible con la que todo el mundo tendrá en mente cuando se siente ante el televisor.