Este miércoles, Telemadrid sorprendía a todos con un comunicado en el que se daba cuenta del presupuesto para 2016 aprovechando para ponerse medallitas por haber logrado deshacerse de la deuda a largo plazo del Ente público.
Afortunadamente, esto es así y los datos son los que son. Pero en ese comunicado se olvidaban de decir varios puntos que quiero aprovechar ahora para mencionar. Y es que los mismos que ahora están presumiendo de empezar a sanear las cuentas de Telemadrid, que no de haberlo hecho aún completamente, son los que triplicaron su deuda hace unos años.
Gastos injustificados, mala gestión y una credibilidad cada día más cuestionada han sido los causantes de una situación de la que poco se puede presumir
El Partido Popular de Madrid, presidido desde hace más de una década por Esperanza Aguirre como ahora, ha sido el encargado de destruir un ente público que estaba entre los mejores de España. Gastos injustificados, mala gestión y una credibilidad cada día más cuestionada han sido los causantes de una situación de la que poco se puede presumir.
Los presupuestos de Telemadrid para el próximo año permitirán que casi 6 millones de euros puedan volver a las arcas públicas. Pero, ¿a coste de qué? Muy sencillo: de destruir la televisión pública e intentar demostrar que no es necesario tenerla. Una cadena barata que no ofrece servicio público es lo mismo que su inexistencia, camino que muchos han querido imponer.
Los gastos del actual Ente son muy bajos para una programación casi muerta. La inversión que se hace es casi nula, con apenas contados formatos de actualidad y entretenimiento con precios muy baratos con los que las productoras tienen que hacer malabarismos si quieren hacer algo competitivo.
Esperanza Aguirre, la causante principal de este desastre
Telemadrid puede que empiece a acercarse a la situación económica de hace unos años, pero ni de lejos está en la situación general que le corresponde. Esperanza Aguirre y su posterior legado la han destruido. Sí, la misma política que se quejaba de la manipulación en laSexta o en la TVE de la etapa Zapatero.
Ella ha sido el principal símbolo en la caída de las televisiones públicas en España. Tanto es así que el anterior director de Telemadrid, José Antonio Sánchez, es actualmente Presidente de RTVE, repitiendo los mismos pasos que ya hizo en la capital y con las mismas nefastas consecuencias.
Cifuentes está intentando arreglar este desaguisado, aunque está por ver si su modelo es el más efectivo
Ahora, Cristina Cifuentes está intentando arreglar este desaguisado, aunque está por ver si su modelo es el más efectivo de los dos que se han planteado en la Asamblea de Madrid o incluso si hubiera sido necesario un tercero que no hemos visto.
Es hora de ponerse las pilas y quitarse las medallas. Los destructores de Telemadrid no pueden venir ahora de salvadores, la ética no debería permitírselo. Han dejado una televisión pública en ruinas que, sin deuda, les será más fácil vender si en algún momento el PP decide privatizarla como se ha amenazado en alguna ocasión.