Martes 24 de marzo. Después de doce días de confinamiento, de alternar el pijama con ropa algo más informal, toca ponerse elegante. El piloto de la cámara del ordenador ya está en verde. Una voz nos anuncia que uno de los protagonistas de La casa de papel espera al otro lado.
El coronavirus ha cambiado el mundo tal y como lo conocemos. También la promoción en televisión. Las entrevistas telefónicas son habituales. Sin embargo, con motivo del estreno de la cuarta temporada de LCDP el próximo viernes 3 de abril, desde Netflix proponen realizar una videoconferencia para lanzar el mensaje de que hay que quedarse en casa y, sobre todo, hacer esos cara a cara más cercanos.
En mi vida podré olvidar la promo de la cuarta parte de 'La casa de papel'
Tan cercanos que, acostumbrados a entrar en la intimidad de los entrevistados, ahora es la nuestra la que también queda expuesta. Nuestras casas, la de los actores y las propias, a la vista de todos. Mi casa es la tuya. Tú en tu casa, yo en la mía.
Imagínense. Al igual que le está pasando estos días a Dani Mateo, El Gran Wyoming o Sandra Sabatés, tu casa convertida casi en plató de televisión. ¿Está bien de luz? ¿Está todo ordenado? ¿Va bien la conexión? ¿Y el sonido?
Y así, sin tiempo para pensarlo, la videoconferencia comienza inevitablemente preguntando por cómo están viviendo este periodo de confinamiento. ¿A qué dedican el tiempo? ¿Cuánto creen que es de importante el entretenimiento en estos tiempos? Y todo con la preocupación de que la conexión no se corte.
“Me ha pillado en casa porque he estado mucho tiempo trabajando fuera, yendo a Praga a grabar, pero justo terminé la semana anterior de que decretaran el confinamiento. Me lo tomo con filosofía. Pero estar en casa es lo más responsable que podemos hacer”, explica Álvaro Morte, quién interpreta a Morte en la ficción.
“Por mi parte es una mezcla entre estar en una película de ciencia ficción y, por otra, tener la suerte de estar sanos, tranquilos, en una casa. En mi vida podré olvidar la promo de la cuarta parte de La casa de papel”, comenta Esther Acebo, Estocolmo en la ficción. “Estoy intentando leer mucho, hacer deporte, jugar a la Play, ver series y cine. Paciencia”, añade Jaime Lorente, quién da vida a Denver.
La importancia de la cultura
En cuanto la importancia del entretenimiento, Morte es muy claro. “En esta situación, la cultura se entiende como un entretenimiento que nos salva el paso del tiempo en casa. Pero, la cultura es mucho más que eso, es lo que nos define como sociedad, como país. Es lo mejor que podemos vender de cara al resto para que sepan cómo somos. La cultura nos da un criterio, un pensamiento, nos da ser mejores, no seguir masas como si fuéramos borregos, tener las herramientas intelectuales para saber si nos gusta algo o no, si estamos de acuerdo con algo o no”.
Si no tuviéramos cultura como sociedad, seríamos animales
Y continúa. “La cultura es básica y necesaria para cualquier sociedad. Y, en estos días, la parte de la cultura que se asocia desde el entretenimiento es muy necesaria. Si la cultura lo primero que hace entretener, el mensaje va a llegar. Si no tuviéramos cultura como sociedad, seríamos animales”.
“Es estos momentos piensas en poder ayudar, ser útil. Y, en nuestro caso, es entretener. Ahora más que nunca nuestra función es importante, que la gente pueda apagarse de las noticias y desconecte con una serie, una película, un libro o un concierto por Instagram”, comenta Acebo. “Ojalá se estrenase en otras circunstancias. Pero todo lo que esté en nuestro mano para ayudar, bienvenido sea”, añade Llorente.
También es importante el mensaje que traslada en estos tiempos la propia serie en el que todos se unen contra un enemigo común. “En la tercera temporada hay un momento en el que se enseñan fotos reales de lo que ha pasado con la serie a nivel mundial. Fue inteligente hacer un homenaje a toda esa gente que, a su vez, nos homenajeaba a nosotros. La casa de papel tiene ese mensaje de luchar contra un sistema que a lo mejor no funciona tan bien como nos han vendido durante este tiempo, manda un mensaje de unidad, de hacer las cosas mejor. Y ojalá la gente lo siga viendo así en esta cuarta parte”.
Una "bomba atómica"
Pero, centrándonos en la cuarta temporada, el creador de la serie, Álex Pina, hablaba hace unos días de que en los próximos capítulos se producirá una “bomba atómica” que hará que la serie no se quede completamente cerrada. Hay que recordar que, como ya avanzamos en BLUPER en exclusiva, la ficción tiene firmada dos temporadas más.
Era necesario para volver a la esencia de 'La casa de papel', que son los personajes
“Tendría que hablar con Álex para que me dijera cuál es la bomba... porque hay varias. Es una temporada que empieza muy emocional, que conecta con los personajes. Y acaba siendo muy trepidante. La situación se convierte en caótica por muchos motivos y va a resultar muy difícil retomar las riendas”, reflexiona Morte.
En este sentido, Llorente cree que “era necesario para volver a la esencia de La casa de papel, que son los personajes. Yo lo he agradecido. Hemos tenido una tercera temporada trepidante y empezar una cuarta metiéndonos más en el corazón de los personajes también es importante". “Es parte de lo especial de la serie. Hay un golpe, pero hay un montón de personas con sus conflictos, sus inquietudes, sus miedos, su dolor. Y es interesante verlo”, añade Acebo.
“Si contamos la bomba, pierde efecto. Va a haber un hito importante para todos que va a provocar mucho llanto”, explica Llorente. “La cosa es que se van a vivir situaciones muy tensas, muy complicadas. Haya o no muertes, va a ser dura. Fue dura de rodar y dura de ver para aquella gente que tiene cariño a muchos personajes de La casa de papel”, adelante Acebo.
Entre esas bombas está la de llevar al personaje de El Profesor al límite. “Es muy interesante ver que el Profesor, que lo tiene todo estudiado y controlado, se enfrenta a una situación que no la tiene estudiada. Es interesante bajarlo a los infiernos para ver si es capaz salir de ahí”, comenta Morte.
*La cuarta parte de 'La casa de papel' se estrena el próximo viernes de 3 abril en Netflix