Supervivientes 2020 se acerca cada vez más a su fin. Y es que, previsiblemente, queda poco más de un mes para que sepamos quién gana esta edición. Por ello, los concursantes ya empiezan a perfilar sus estrategias de cara a conseguir un puesto en esa final, que probablemente viviremos por primera vez desde Honduras.
Uno de los concursantes que más notoriedad tiene es Avilés, y no precisamente por sus dotes de supervivencia, sino por su especialidad en sacar de quicio a la gente. Sinceramente, compadezco a los concursantes que deben convivir con él. El caso de Avilés no es un caso de que todos vayan contra él porque lo ven un rival potente o porque le tengan manía. Puedes tener un problema con una o dos personas pero, cuando son la mayoría, quizás deba replantearse que, a lo mejor, el problema es él.
Siempre echa mano de temas ajenos al concurso para desestabilizar y atacar
El periodista no es una persona ingenua o inocente, sabe jugar mucho con las personas, y juega muy bien. Las discusiones con él no son naturales, son impostadas. Siempre echa mano de temas ajenos al concurso para desestabilizar y atacar a los concursantes, como pasó anoche Barranco.
El colaborador de Viva la vida atacó al extronista sin ningún tipo de miramientos. Le acusó de llevar una estrategia desde España y le sacó, no sé muy bien por qué, el tema de Gloria Camila y Kiko Jiménez, que no venía a cuento. Lo peor de todo, es que Barranco estaba al borde del colapso y llorando de la impotencia, y Avilés no hacía más que avivar el fuego para conseguir no sé que fin.
Es intolerable que estés viendo una persona que está al borde de sus fuerzas y que tú, de manera impecable, sigas machacándolo. No tiene nombre. Con este tipo de actitudes, uno hace plantearse si realmente Avilés ha sufrido bullying porque una persona que sabe lo mal que se pasa con algo así, tiene empatía y Avilés carece de ella.
El periodista es el anticoncursante de cualquier reality pese a generar tramas. Es tan mal compañero y tan mal amigo, que no debe bajo ningún concepto seguir ni una semana más en el concurso. Apuesto porque sea el próximo expulsado. Avilés fue capaz de sacrificar a su amigo delante de toda España sólo por acaparar unos minutos de atención, y es lo más repugnante que he visto en tiempo en algún reality.
Ahora que también esto también ha servido para que veamos a Barranco, hasta ahora desaparecido en el concurso. No obstante, el extronista no merecía pasar ese mal rato por culpa de una persona tan fría y calculadora como Avilés. Ya está bien de justificarse que todo vale por el show. ¡No, Avilés! No todo vale, y no te engañes, ni eres buen profesional ni eres buen compañero, eres lo más negligente que ha pisado Honduras en tiempo.
Finalmente Barranco decidió romper lazos con el que creía que era su amigo, y Rocío debería seguir el mismo camino porque será la próxima víctima de Avilés. Y, sino, al tiempo.
Más tarde, Fani fue la expulsada definitiva del concurso. Me da la sensación de que estamos echando primero a los que más juego dan. Cristian, Ferre e, incluso Bea, se merecían mucho más quedarse que otros que todavía siguen concursando.
Después se produjo la reorganización de los grupos. A Rocío le tocó el mismo grupo que a Ana María, y al pobre Barranco, el mismo que Avilés. También los amantes de Cayos Cochinos, Ivana y Hugo, se separaron.
Para disputarse la plaza de líder de cada equipo, los supervivientes se sometieron al Coco Quiz, una prueba de cultura general. Más de una vez me dolieron los ojos con las respuestas de algún superviviente: Belazqued no pintó Las Meninas, por ejemplo. Jorge ganó la prueba y fue líder de siervos, mientras que Ivana ganó la prueba en mortales y fue la líder del grupo. Más tarde, los nominados fueron Barranco y Avilés, y Nyno y Yiya, respectivamente.