Lo de que los políticos han invadido la televisión ya es algo que todo el mundo tiene asimilado. Cada día, los líderes de partidos participan en algún programa de televisión. Ya no les vale con los formatos puramente informativos, sino que han comenzado a participar abiertamente en los programas de entretenimiento para mejorar su imagen de cara a las elecciones del próximo 20 de diciembre.

¿Qué buscan los políticos con este tipo de formatos? Buscar un público al que no acceden a través de los programas de televisión más informativos. Por ejemplo, Salvados marcó el pasado domingo un 12,8% de cuota en el público femenino y un 12,7% en el público de más de 65 años. La media del programa fue de un 12,9%. Estos formatos tienen una mejor aceptación entre el público joven y masculino, por lo que los líderes tienen que aceptar otro tipo de formatos más aceptados entre las mujeres jubiladas o, al menos, mayores de 45 años.

Sorprendente es la noticia de que Rajoy y Pedro Sánchez acudirán a En la tuya o en la mía de Bertín Osborne o que Albert Rivera y Pablo Iglesias vayan a ¡Qué tiempo tan feliz!. Pero no es tan raro cuando observamos el público que se esconde detrás de sus datos de audiencia.

Si bien otros programas están liderados por los hombres, las mujeres mayores de 65 años son las que mandan en el programa de Bertín Osborne en TVE. Mientras en los jóvenes de 13 a 24 años el programa marcó esta semana un 12,5%, el espacio de entrevistas hizo un 31,6% en los mayores de 65 años. Entre los hombres marcó un 18% y entre las mujeres un 25,3%.

Se trata de un análisis bastante parecido al de ¡Qué tiempo tan feliz! Pablo Iglesias y Albert Rivera, llamados a ocupar por primera vez el Congreso, necesitan a los mayores para hacerse un hueco en la política. Por eso el espacio de María Teresa Campos es perfecto para ellos. Este sábado marcaron un 10,1% entre los hombres pero un 18,9% entre las mujeres. Aunque sólo hicieron un 5% entre los jóvenes a los que tienen más conquistados, el programa hizo un 25% entre los mayores de 65 años.

Quizá estos dos programas son los que más han sorprendido cuando se anunciaron a sus invitados, pero no han sido los únicos con intervenciones de líderes. Sin embargo, son En la tuya o en la mía y ¡Qué tiempo tan feliz! los que mejor demuestran la estrategia de los partidos para captar nuevos públicos. El hormiguero, durante la vista de Pablo Iglesias hace dos semanas, alcanzó un 24,8% de cuota entre los hombres y un 18,9% entre las mujeres. En cuanto a la edad, funcionó mejor entre los espectadores de 24 y 44 años, con un 24%.

Planeta Calleja, que esta temporada ha contado con Albert Rivera y tendrá entre sus filas a Soraya Sáenz de Santamaría. El programa de Rivera fue más visto por mujeres (5,7%) que por hombres (5,5%). El programa triunfa entre los jóvenes de 25 a 44 años, donde marcó un 8,3%.

Por Al rincón, de Risto Mejide, también se han ido sentando los líderes de los principales partidos (menos Mariano Rajoy). El programa también mejora mucho su resultado entre las mujeres, donde alcanzó un 11,1% con Pedro Sánchez, y no destaca entre los hombres, con un 7,8% con el líder del PSOE.

Los políticos acuden a este tipo de programas con más entretenimiento que información para descubrirse ante nuevos y posibles votantes. Un público potencial al que no acceden a través de programas como El intermedio, pero al que no pueden dar la espalda. El programa de Wyoming en laSexta funciona mejor entre los hombres que entre las mujeres. Su mejor rendimiento lo da entre el público de 45 a 64 años.

Finalmente, hay que analizar el caso de las entrevistas de prime time que Sánchez y Rajoy tuvieron en TVE con Ana Blanco. Estos especiales alcazan directamente al público más convencional de la pública y más tradicional como votantes: los jubilados. La entrevista de Rajoy alcanzó un 11,7% entre los hombres y un 19,9% entre los mayores de 65 años, mientras que llegó a un 11,6% entre las mujeres y un 4,1% entre los jóvenes de entre 13 y 24 años. Una tabla de resultados que se repite con Pedro Sánchez.