La casa de las flores se estrenaba hace dos veranos como una reinvención del género 'telenovela' mucho más enfocado a la comedia. Un experimento que funcionó con creces, puesto que la ficción creada por Manolo Caro se convirtió en uno de los fenómenos de ese año, sobre todo en España y México.
La promoción de la tercera temporada ha sido prácticamente nula
Además de ello, la serie consiguió excelentes comentarios por parte de la crítica especializada, que alabó que abordara temas como la bisexualidad, la transexualidad, las infidelidades o la adicción a las drogas de una forma tan irreverente, cercana al cine de Pedro Almodóvar. Todo esto llevó a Netflix a renovar la serie por dos temporadas más.
Sin embargo, esto no fue más que un romance de verano que ya nunca más se ha vuelto a repetir. Tras el éxito, la plataforma apostó fuerte por el estreno de la segunda temporada, incluso se llegó a estrenar en el FesTVal de Vitoria como una de las grandes apuestas de Netflix para el público hispano.
Además, la serie se españolizó, teniendo en cuenta que uno de sus principales nichos de público se encontraba en nuestro país. De esta forma, actores como Eduardo Casanova, Eduardo Rosa o María León se unieron al elenco de actores.
Pero esta vez las críticas fueron nefastas. "Pérdida de su esencia", "predecible" o "aburrida" fueron algunos de los calificativos que le otorgó la crítica especializada. Además, el impacto entre el público fue mucho menor del esperado.
A pesar de ello, la serie ya estaba renovada por una tercera etapa, la final, que llegó al catálogo de la plataforma el pasado jueves 23 de abril. Y los espectadores han tenido la oportunidad de comprobar si La casa de las flores ha remontado el vuelo.
Pero... no. Teniendo en cuenta los antecedentes, la promoción por parte de Netflix ha sido prácticamente nula. Un estreno casi de tapadillo que no ha provocado apenas ruido mediático, a pesar de la popularidad que tuvo hace unos años.
Entrevistas casi inexistentes de los actores en los medios de comunicación e incluso muy poca difusión por parte Netflix en sus redes sociales. Únicamente Paco León aparecía en El Hormiguero para hablar de la ficción... y de paso realizar un spoiler que ha enfadado a los seguidores de la ficción.
El tope de la tercera temporada
Para volver a captar la atención del público, esta tercera etapa ha contado con una estructura algo diferente. Una temporada que narraba el pasado de Virginia de La Mora, con flashbacks que viajaban hasta 1979 para experimentar los años más desenfrenados de la matriarca.
Las críticas no han sido demasiado positivas por parte de la prensa, aunque si se ha valorado que ha recuperado algo de su primera esencia y que la temporada remonta a partir de su ecuador. No obstante, a pesar de ello, para muchos fans de la serie el final no ha estado a la altura.
Netflix aplica una política de renovaciones artificiales para fomentar el consumo
El público también parece haberle dado la espalda de forma definitiva. Y es que, chando un vistazo al ránking de lo más visto en Netflix se puede comprobar que, a pesar de llevar una sola semana publicada, la serie ya está en el puesto 7 de lo más visto, siendo superada por La casa de papel, que se estrenó hace casi un mes.
Pero, ¿por qué renovó Netflix la serie por una tercera temporada sin saber cómo iba a funcionar la segunda? A la hora de realizar estas renovaciones, un momento clave para la platafora a la hora decidir si continuar una ficción o no, se produce a partir de la segunda temporada: si la ficción en cuestión no ha tenido el impacto requerido y Netflix no ve un potencial de crecimiento significativo más allá de la tercera temporada, se decide darle un final.
Según los datos de Netflix, más allá de la temporadas dos y tres, por término medio las series no generarían significativas nuevas suscripciones. Y así, tener entre unos 24 y 30 episodios de una serie se considera suficiente para satisfacer a los espectadores. Así sucedió con One day at time y sucederá con Dark o Alta Mar.
En este caso, la plataforma prefiere apostar por una nueva ficción para así ayudar a la percepción de que está sumando nuevas series constatemente. De hecho, tras el final de Las chicas del cable y Alta Mar, llegará a la plataforma otra serie producida por Bambú Producciones y protagonizada por Blanca Suárez: Jaguar.
De esta manera, aunque el espectador pueda llegar a sentirse molesto por la cancelación de una de sus series, esto se suple con la llegada de una nueva batería de series. Según el Barómetro OTT de GECA, un impresionante 90,9% de los españoles que son abonados a plataformas de streaming renovarían su suscripción