Suhaila Jad fue una de las concursantes de Supervivientes 2014 que tuvo que abandonar el programa dejando a medias lo que había comenzado. No fue por no aguantar el hambre o los mosquitos, no enfermó ni se lesionó, simplemente decidió pasar más tiempo con su padre cuando descubrió que estaba enfermo. Ahora, un año más tarde, volverá a ser una de las protagonistas para la edición de 2015, una segunda oportunidad que muchos seguidores critican (y otros tantos celebran).

En España no se suelen dar segundas oportunidades. Reciclar concursantes que saltan de un reality show a otro es muy habitual, pero repetir en el mismo formato es algo que casi nunca hemos visto. Rebeca Pous estuvo en Aventura en África y regresó en Supervivientes 2014 y Geno Machado se convirtió en la última expulsada de la última edición de Operación triunfo tras haber sido la primera expulsada de la primera, pero son casos puntuales.

Es cierto que la primera edición de El reencuentro y La revuelta estuvieron formadas íntegramente por exconcursantes de Gran Hermano, pero no existen más ejemplos. En cambio, si miramos fuera de nuestras fronteras descubriremos que lo que aquí es novedad allí se ha consolidado. Las versiones All-Stars (toman el nombre de la tradición deportiva de unir puntualmente a un equipo formado por los mejores jugadores) son más que habituales en prácticamente la totalidad de los formatos, y han demostrado ser un imán para las audiencias.

En otros países como Portugal o Francia, el género 'All Stars' está muy instaurado en sus realities

La mecánica de estas ediciones es exactamente la misma, por tanto no es comparable al caso de Chari Lojo o Marta López; quienes han concursado en Gran Hermano, Gran Hermano VIP y la segunda edición de El reencuentro (con representantes de muchos programas diferentes), tres formatos diferentes aunque con demasiadas cosas en común.

Una situación bien distinta se vive en Portugal, donde se ha creado un programa especial utilizando esta mecánica. Desde enero de 2013 se han emitido dos ediciones normales de Secret Story (nombre que recibe Gran Hermano en el país) y cuatro protagonizadas por exconcursantes. Por otro lado, Francia produce dos temporadas de Koh-Lanta (Supervivientes) cada año, una con nuevos aventureros y otra con antiguos participantes. Pekín Express, Project Runway, The apprentice, La academia… Prácticamente ningún formato ha escapado a esta tendencia.

Survivor y The Challenge, los principales ejemplos de All-Stars

Todo un ejemplo de ello es Survivor. La versión estadounidense de Supervivientes emite actualmente su edición número 30 y, aunque parezca mentira, algunos concursantes han repetido hasta en cuatro ocasiones. En total, nueve temporadas han contado con antiguos participantes que regresaban para una nueva oportunidad, enfrentándose a nuevos robinsones o viéndose las caras con viejos conocidos.

Ahora bien, el rey del All-Stars es sin duda The Challenge, un formato creado por MTV USA que reúne cada año a estrellas de dos de sus programas más famosos: The Real World (considerado el primer reality de convivencia de la historia) y Road Rules. De momento se han emitido 26 ediciones y 40 de sus participantes han participado en cinco o más de ellas (el récord está en once). El show es todo un éxito, por lo que su andadura en pantalla continuará, volviendo a invitar una y otra vez a las mismas personas.

El género 'All Stars' crea continuidad entre ediciones

Gracias a esta dinámica el género del reality show adquiere una nueva dimensión. Todos los concursantes son protagonistas de una historia que trasciende las paredes de la casa, las orillas de la isla o las fronteras del escenario en el que se realice, sean éstas las que sean. Si hasta ahora cada una de las ediciones de estos concursos era independiente de las anteriores, a partir de este momento se crea continuidad en los contenidos.

¿Volverá a utilizar el concursante la estrategia que le funcionó anteriormente?, ¿habrán arreglado sus diferencias o se seguirán nominando?, ¿se despertará de nuevo la llama del amor entre dos amantes del pasado? Éstas son algunas de las preguntas que se plantean al comenzar un nuevo capítulo de este relato, el cual se camufla como una nueva edición del reality.

¿Sería posible una apuesta fuerte por el All-Stars en España?

Imaginemos por un momento que Gran Hermano 16 volviese a contar con Paula, Omar y Lucía entre sus concursantes, que Belén Esteban y Olvido Hormigos se reencuentran en GH VIP 4. O que Bisbal y Chenoa se suben de nuevo al escenario de Operación Triunfo en una nueva temporada. Son reuniones que ya provoca Telecinco a través de su engranaje de concursos con famosos pero en gran escala, no sólo se produce un reencuentro entre dos exconcursantes, sino que todo el casting está relacionado entre sí.

Quizá Suhaila Jad sólo está recibiendo una nueva oportunidad de terminar aquello que dejó a medias en Supervivientes 2014, pero también está explorando nuevos caminos de hacer telerrealidad en España. Tarde o temprano el All-Stars reclamará su sitio, y seguro que las cadenas encuentran el hueco apropiado en sus parrillas.