Ha sido la noticia del día en televisión. RTVE anunciaba después del mediodía que fulminaba la marca Los Desayunos tras 26 años en antena para que la tertulia política quede integrada en la nueva franja matinal que presentará Mónica López.

A su vez, su presentador Xabier Fortes volverá la próxima temporada a dirigir y presentar La noche en 24, espacio del Canal 24 Horas que ya condujo durante la temporada 2011-2012. Sustituirá a Marc Sala, que seguirá vinculado a RTVE con nuevos proyectos profesionales.

Con motivo de ello, en BLUPER hemos querido hablar con Fortes, quién respeta la decisión de la dirección de la radiotelevisión pública, pero aconseja que no se haga desaparecer una marca tan mítica como Los Desayunos.

Hay que entender también que ahora viene el nuevo equipo con nuevas ideas

Hoy se ha hecho oficial que TVE prescindía de la histórica marca de Los Desayunos, de la que has sido su último presentador durante estos dos últimos años. ¿Cómo estás?

Bien, tratando de asumirlo, pero sobretodo pensando en acabar la temporada de la mejor manera posible. Los datos nos van demasiado bien en cuanto a consolidación del programa, de la audiencia y de la marca, y ahora cuando acabe la temporada me tendré que poner a ver algunas cosas de la próxima temporada. Espero llegar al último mes de Los Desayunos para ponerme a pensar en La Noche (en 24 horas).

Han sido dos años maravillosos. Me encantaba evidentemente hacer la mañana, que es la que marca el ritmo informativo de la mañana porque está pasando y lo estás contando al momento. Pero hay que entender también que ahora viene el nuevo equipo con nuevas ideas y tienen todo el derecho del mundo a querer plasmarlas esté o no de acuerdo. Eso es otra cosa. Pero tienen todo el derecho a plasmarlas y que se les de margen de tiempo suficiente para que se pueda ve si funciona o no.

¿Qué valoración haces de estos dos años al frente de Los Desayunos?

Yo siempre he sido muy subjetivo en cuanto a sujeto, pero creo que hemos hecho un buen trabajo. Es un programa que te obliga a levantarte a las 4 de la mañana y lo acabas al día siguiente por la tarde. También va cambiando, te puedes equivocar en el registro de las preguntas o en el minutado... Es inevitable. En general, si lo analizamos desde que empezamos hasta ahora, ahí se ve la audiencia. Y la curva, claramente ascendente, se ha consolidado de manera definitiva esta temporada.

Y del cuadro de analistas que tenía, que hemos intentado de variar de la manera más plural posible, como sobre todo del equipo que tenía desde José Luis Regalado a Beatriz Ariño, también de los redactores, que no voy a decir los nombres, porque seguro que me dejo alguno. Pero todo el equipo y todos los tertulianos hemos conseguido formar un equipo conjunto y ese fue el resultado de Los Desayunos durante estas dos temporadas.

¿Qué acontecimiento te ha sido más difícil cubrir? ¿Por qué?

Los tres sin discusión serían El Debate, por lo que supuso en sí y las previas, así como todo el ‘‘lio’’ que se montó. Además que fue el primer debate entre los principales candidatos de la historia de la radiotelevisión pública y tuve el honor de hacerlo y de ser el primero en presentarlo. Además, creo que todo el equipo de RTVE lo hicimos muy bien y sobr etodo por los antecedentes que había entorno a El Debate. También el especial que hicimos por cuestiones históricas, familiares y personales de la exhumación de los restos del dictador Franco. Y también el tema de la investidura porque suponía el primer gobierno de coalición de la historia de España.

Durante tu etapa al frente de Los Desayunos has conseguido levantar y remontar sus audiencias. ¿Cómo crees que lo has conseguido?

No lo sé. Realmente cuando me pongo a hacer un programa, no pienso en conseguir audiencia o en cuál es la tecla para conseguirla, sino en hacer un buen programa. Teníamos que hacer un programa lo más plural posible. Creo que variamos la tertulia y hemos contado con un análisis de la forma más variada y plural, con fallos seguramente porque no todos los días puedes acertar, pero creo que le dimos un toque plural, diverso, político... Pero también con gente que sabía de literatura, de historia... Esa fue la clave.

Hemos seguido una única línea: contar lo que pasa, pese a quien le pese

También el equipo, por supuesto, y contar lo que estaba pasando: si le gustaba al Gobierno bien y si no le gustaba, pues igual de bien. Y en la oposición, exactamente, lo mismo. Normalmente, cuando cuentas las cosas que fastidian a la oposición, el gobierno está contento. Pero cuando cuentas las cosas que afectan al Gobierno, este está menos contento y la oposición más contenta. Esto va por barrios. Hemos seguido una única línea: contar lo que pasa, pese a quien le pese. En estos dos años se ha notado el respaldo de la audiencia, que ha sido evidente. Creo que hemos acertado.

No has sido el único presentador de Los Desayunos ya que es una marca que nació en 1994, pero sí que serás el último ya que TVE prescindirá de la marca. ¿Qué has aportado tú al programa?

Espero que se consiga conservar la marca de Los Desayunos, sino sería una lástima y una pena. Obviamente no voy a entrar a calificar las decisiones que toma la dirección ya que, en este aspecto, tendrás que ver y analizar y lo harán con la mejor intención del mundo. Hay que respetarles y darles el margen para llevar a cabo el proyecto y que se consolide. Es una marca muy arraigada, que fue el decano de los programas de ese estilo. Obviamente, me daría mucha tristeza que desapareciese. Es una marca tan potente como el Telediario, Estudio Estadio o Informe Semanal. Recomendaría a TVE que no se suspendiese.

El sello que le dimos nosotros fue un poco descarado en ocasiones. A veces, en la televisión pública, el rigor con el rigor mortis. Y creo que, siendo riguroso en la información, se puede también hacer las cosas con gracia o sin ser tampoco tan modosos, ni tener miedo a pisar charcos. Creo que hay que pisar todos los charcos necesarios para hacer un programa con interés y que transmita para que la gente esté pendiente. Y eso creo que es lo que hemos hecho.

¿Ha sido fácil pilotar un programa tan histórico cómo éste? ¿Por qué?

Fue complicado ponerlo en marcha, cambiar toda la idea que había de Los Desayunos, renovar el equipo al 100%, cambiar de una forma notable también la mesa de análisis. Fue fácil por el equipo que tuve, por Regalado, Coto, Ariño... Toda la redacción así como el equipo técnico. También fue fácil por la aportación coral de todos los tertulianos que fueron decisivos para darle un sello distintivo al programa. Lo que te decía de lo del rigor o rigor mortis, lo que no quería era caer en la discusión sin contenido o en la falta de educación. A mí me gusta la riqueza del programa, pero manteniendo los parámetros de la televisión pública.

Así como cuando te nombran, no pides explicaciones; cuando te cambian, no las debes pedir

¿Por qué TVE ha decidido prescindir de él? ¿Qué criterios se han seguido?

No lo sé, habría que preguntárselo a ellos. Yo lo desconozco. A mí me dicen que no tengo hueco en las mañanas, que van a cambiar todo el concepto televisivo y me ofrecen La Noche (en 24 horas), y tengo que aceptarlo. Así como cuando te nombran, no pides explicaciones; cuando te cambian, no las debes pedir. He sido siempre muy respetuoso y disciplinado con la casa en la que llevo 30 años, pero las razones las desconozco.

Imagino que querrán darle un cambio a la imagen matinal en su conjunto y no me ven a mí o al programa en el hueco ese. Me consta, y así debe ser, que van a hacer una apuesta importante e interesante, y ni el programa ni yo tenemos hueco. Y eso hay que aceptarlo. Una cosa es mi opinión al respecto, si me parece una buena o mala idea, y es una opinión que me guardo. Pero sí que el mínimo es respetar y darles el margen y el tiempo.

¿Cómo afrontas esta nueva etapa en el 24 horas?

Voy a empezar a hacer lo mismo, e intentaré hacer el programa lo menos plano posible y lo más transgresor posible que se pueda hacer en un programa de política. Al fin y al cabo, cada uno aporta su personalidad. Marc Sala, que es mi predecesor, hizo un programa muy serio en todos los sentidos, muy riguroso, muy buen programa..

Ahora quieren darle un nuevo aire, al igual que ahora quieren darle un nuevo aire a la franja de Los Desayunos. Habrá que aceptarlo y hacerlo. Yo voy con mi estilo y con la marca que tengo de hacer programas de que, junto al rigo, haya cierta posibilidad de transgresión. Voy a ir con esa idea y ya iremos viendo. Pienso a donde quiero ir, pero tampoco tengo todo calculado. Al final el programa tiene vida propia, mi colaboradores tienen vida propia.. Al final es una mezcla de todo.

¿Cuándo y cómo te han comunicado la decisión?

Hace dos semanas. Fue Enric (Hernández) quién me dijo que lo pensara y lo pensé... Estuve más cerca de irme a Pontevedra porque llevo tres meses sin ver a mi familia y, como mínimo, tardaré otros dos. Y aunque me considere una persona entera y fuerte, pasa factura. Ver como tu hijo pequeño cambia de voz y no lo reconoces.. te pasa factura. Nunca he estado tanto tiempo separado de mi familia, y muchísimo menos de mi mujer y mis hijos. El cuerpo me lo pedía y estuve muy cerca de irme a Pontevedra. Si no me fui, fue en parte porque consideraba que, irme a Pontevedra, se podía interpretar como que me iba cabreado o dando un portazo.

Estuve muy tentado de irme a Pontevedra a descansar, a ser corresponsal sin buscarme tantos líos

Creo que tenemos que estar muy agradecidos a la televisión pública. Es mi casa desde hace 30 años y no quería dar la impresión de que me iba enfadado. Hay que saber irse con elegancia de los sitios y creo que lo estoy haciendo honestamente. Estuve muy tentado de irme a Pontevedra a descansar, a ser corresponsal sin buscarme tantos líos y estar cerca de la familia.

Al final me han hecho una buena oferta, que tengo que agradecer también. La Noche (en 24 horas) es también un programa muy agradecido. Fue hace dos semanas que me lo dijeron y les contesté la semana pasada. Yo por mí hubiera continuado en Los Desayunos. Pero, si la nueva dirección cree que no encajo allí por mi registro, por mi perfil o mi programa, es normal que quieran cambiarlo. Si consideran que yo no debo seguir, tienen todo el derecho a hacerlo. Yo hubiera preferido quedarme con Los Desayunos.

 ¿Qué opina de los ataques que recibe continuamente TVE?

Cuando no hay argumentos en política, se ataca la televisión de todos. La anterior dirección recopiló decenas de denuncias por manipulación y censura, y los trabajadores nos pusimos firmes, denunciamos y exigimos un cambio. Solo hay que ver los Telediarios para saber que son cualquier cosa menos gubernamentales. Y así pasa también con La Noche (en 24 horas) que conducía Marc Sala, o Los Desayunos, donde ha habido cosas que han podido gustar al Gobierno y otras que no, y en la oposición, lo mismo. Es un lugar común para quejarse.

¿Qué futuro tiene RTVE?

Tiene todo el futuro del mundo porque es necesario. Como digo yo siempre: los medios de titularidad pública deben tener un servicio público. A veces, se ve como demasiado sesgo depende en qué medio progresista o conservador, llevan demasiado las cosas a su sardina. Por eso es necesaria más que nunca la televisión pública y esperemos que encuentre siempre el buen camino.