Las elecciones del pasado 24 de mayo han abierto un nuevo panorama en las cadenas autonómicas. La desaparición de las mayorías absolutas en todas las comunidades en que hubo comicios abre una nueva puerta para la regeneración de estos entes públicos y su despolitización.
Los partidos que quieren gobernar cada comunidad están obligados a pactar para buscar apoyos, y precisamente en esta línea se están empezando a ver algunos puntos que hacen pensar que las cadenas públicas autonómicas aún tienen una salvación. Partidos minoritarios están poniendo como condición a esos acuerdos que se respeten las cadenas autonómicas y no se conviertan en los "cortijos" que hasta ahora han sido.
La pérdida de la mayoría absoluta del PP en Madrid obligará a Cifuentes a una nueva Telemadrid
Uno de los casos más sonados en los últimos días es el de Telemadrid. La autonómica madrileña es una de las históricas que está más hundida por la gestión que se ha realizado politizando la programación en favor del Partido Popular. Estos volverán a gobernar con Cristina Cifuentes, pero lo harán con el apoyo de Ciudadanos que les ha obligado a firmar una regeneración de Telemadrid.
No ha ocurrido lo mismo con Canal Sur en Andalucía. El pacto se ha hecho en similares circunstancias, aunque en este caso Ciudadanos ha apoyado la investidura del PSOE de Susana Díaz sin pedir ninguna condición de mejora con su autonómica, muy criticada también.
Cambio radical en Castilla la Mancha TV
Mucho más radical será el cambio en Castilla la Mancha. María Dolores de Cospedal dejará de gobernar y dará paso al PSOE de Emiliano García-Page. Las críticas que ha recibido Castilla la Mancha TV durante su mandato, con Ignacio Villa en la dirección, han sido muy sonadas, pero ya son historia.
García-Page se ha comprometido a una autonómica en Castilla la Mancha alejada de la de Ignacio Villa
Ahora, se inicia una nueva etapa en la pública manchega, y García-Page lo tendrá más complicado si quiere manipular como su predecesora, ya que tendrá que rendir cuentas ante Podemos, que le garantizará su presidencia.
“Me he comprometido a promover un sistema de mayoría cualificadas y que blinde la pluralidad profesional de la cadena", aseguraba García-Page hace unos días en Al rojo vivo. Esa será la teoría sobre la que trabaje, pero la práctica aún está por demostrar.
¿Reabrir Canal 9?
En Valencia, el cambio de Gobierno se enfrenta a la decisión sobre si reabrir o no Canal 9, que Alberto Fabra cerró en noviembre de 2013. El Partido Popular deja la Generalitat Valenciana y los nuevos gestores tendrán que valorar sobre el futuro de la televisión pública.
El nuevo gobierno de la Generalitat Valenciana decidirá si reabrir Canal 9 o lanzar una nueva autonómica
Ximo Puig, del PSOE, será el nuevo Presidente con el apoyo de Mónica Oltra, de Compromis, y de Podemos. Los tres partidos tienen una idea común en la cabeza: quieren que la Comunidad Valenciana tenga autonómica.
Una vez entren en el Gobierno tendrán que ponerse de acuerdo sobre qué hacer. Las posibilidades están desde la reapertura de Canal 9 a la inauguración de una nueva autonómica, pero parece claro que la situación actual no se mantendrá por mucho tiempo.
El caso de 7TV en Murcia
En Murcia, la gestión se ha externalizado manteniéndose como una televisión pública a pesar de su gestión privada. Grupo Secuoya ha ganado el concurso y probará un nuevo modelo por el que ya se han interesado otras comunidades.
En este caso, hay un contrato que permite que este sistema esté en vigor durante al menos tres años, por lo que el resultado de las elecciones poco importaba. En cualquier caso, el Partido Popular seguirá gobernando, por lo que el modelo parece garantizado si se demuestra viable en su puesta en marcha.
Renovarse o morir
Las autonómicas reciben así en muchos casos una nueva oportunidad para demostrar que son un elemento necesario en la sociedad. En los últimos años, la manipulación desde todas las vertientes políticas las ha dejado en un lugar muy deplorable, por lo que si no se aprovecha la actual situación de inflexión podría ser su última oportunidad.
O las autonómicas se renuevan o morirán como ha ocurrido ya con Canal 9, que incluso ahora tiene una oportunidad de renacer de sus cenizas que quizá no vuelva a tener en el futuro.
Además, los cambios electorales que está habiendo permiten vislumbrar un halo de esperanza también en TVE. Si con la fragmentación de los parlamentos autonómicos las cadenas regionales públicas pueden sobrevivir, éste podría ser el camino a seguir en la estatal si ocurre lo mismo en las próximas elecciones generales de noviembre.