El final de la era Cospedal en Castilla la Mancha TV no trae consigo el adiós a todos los problemas. Otros vendrán con la nueva dirección tras la destitución de Ignacio Villa, y algunos se heredan de la etapa anterior.

Según informe Ecoteuve, la televisión pública manchega inicia la nueva era con Carmen Amores como directora general afrontando una deuda de 6,3 millones de euros que han dejado sus predecesores en el cargo.

Las cuentas a final de 2014 ofrecían estas cifras, por lo que a día de hoy podría ser incluso mayor el agujero económico. En el pasado año, se aumentó en 57.000 euros el montante negativo de Castilla la Mancha TV.

Esto es así a pesar de la inyección de dinero público que cada año el Gobierno de Cospedal le ha dado. De los 32,4 millones de euros que ingresó en 2014, 30,07 provenían de las arcas públicas, por lo que una mala gestión ha sido la culpable de este saldo negativo.

A estos problemas se suman los que Ignacio Villa tuvo con Hacienda, quien le reclamaba más de medio millón de euros por los ejercicios de 2013 y 2014. El antiguo director de Castilla la Mancha TV se negó a devolver porque aseguramente que las cantidades eran improcedentes.