Antena 3 decidía triplicar nuevamente la emisión de Mujer esta semana (lunes, martes y miércoles) con motivo de otro hecho que cambiará la historia de Bahar, el encuentro fortuito de Sarp Çeşmeli / Alp Karahan (Caner Cindoruk) con Sirin (Seray Kaya).

Sin embargo, con motivo del cambio en la duración de los capítulos, de 140 minutos a 70 minutos, este crucial evento no sucedía en el capítulo de este lunes sino ya en el del martes.

En el capítulo del lunes, Sarp se mostraba obesionado con Bahar (Özge Özpirinçci) y regresaba nuevamente al cementario para visitar la tumba de su mujer y de sus dos hijos. Más tarde, confesaba a su mujer Piril que a veces recuerda todo y "otras no me queda nada". "A Doruk no le vi ni una sóla vez. No vi la cara de mi hijo", decía entre lágrimas.

Ya este martes, el marido de Bahar vuelve a soñar con ella, lo que le lleva a hundirse nuevamente en un baño de lágrimas. "Bahar está muerta. Tú lo sabes", le dice Piril.

A pesar de ello, Sarp sale a buscarla porque dentro él hay algo que le dice que sigue viva. Por eso, acude a casa de Hatice, pero pasa de largo al ver que ya no está el cartel en el que Enver se anuncia como sastre.

Antes de regresar, decide preguntar en la tienda de telefonía. Y, justo cuando va a salir del local, se produce el encuentro que él menos deseaba: la última persona que vio en su anterior vida, la causante de su ‘muerte’, el origen de sus problemas… Sirin.

La hermanastra de Bahar no da crédito a lo que está pasando. "Sarp, ¿eres tú? Tengo que estar perdiendo el juicio", dice la joven en medio de un ataque de nervios. "¿Cuánto tiempo?", le pregunta él. "Estás vivo y no puedo creerlo. Te he echado mucho de menos. No he dejado de pensar en ti desde la última vez que te vi", dice la que fuera su amante ante la negativa de él a que le toque.

Finalmente, Sarp/Alp le lleva al cementerio donde supuestamente está enterrada Bahar y sus dos hijos. "Siento mucho lo que hice esa noche en el ferry. Estaba enamorada de ti", le dice ella. "¡Me arruinaste la vida! ¡Te odio con toda mi alma! ¿Por qué razón sigues viviendo y no te has muerto?", le espeta él.

Después de esto, Sirin intenta contar a Bahar lo que ha pasado, pero su hermanastra se niega a hablar con ella. "Por mí te puedes ir al cuerno", le dice por teléfono. "¡Tienes que escucharme, hermana! ¡Es muy importante!", le advierte Sirin antes de contarle a Hadise que ha visto a Sarp vivo.

Sin embargo, Sarp le manda una carta y le pide que olvide lo que ha pasado y que no cuente nada. De esta manera Sirin termina explicando a su madre que si le ha dicho que Sarp estaba vivo era porque creía haberlo visto.

Finalmente, los remordimientos terminan consumiendo a Sirin y confiesa a su madre que el marido de Bahar está vivo. "Sarp me ha llevado a un cementerio y he visto la tumba de mi hermana y de los niños", le confiesa. "¿No le has dicho que no están muertos?", le pregunta Hadise. "Creía que Sarp quería matarme. Tengo que volver a verle y contarle la verdad", le explica su hija.

Por todo ello a ver a Bahar para contarle todo. Pero, cuando ya estaba en la puerta de la casa de su hermanastra, recibe una llamada amenazante. "Creo que no lo entendiste. ¡Sal de ahí ahora mismo", le dice una voz.