Han pasado 25 años de Cristal en TVE y todavía se la sigue recordando. Y eso que antes que ella ya hubo otra telenovela que hizo gastar kleenex por un tubo y no es otra que la mexicana Los ricos también lloran.

En España las telenovelas, los culebrones o melodramas han gozado de la audiencia del público, primero en las novelas por entregas o folletines, después con la llegada de las radionovelas (cierro los ojos y veo a mi madre cosiendo en el taller mientras junto a sus compañeras escucha sin perder puntada las alegrías y miserias de la protagonista de Simplemente María).

Lupita Ferrer, Jeannette Rodríguez y Carlos Mata protagonizaron la telenovela 'Cristal'

En este mes de agosto que empieza a dar sus primeros pasos, comenzó sus emisiones Cristal, telenovela venezolana de corte romántico basada en una historia escrita por Dellia Fiallo y ambientada en el mundo de la alta costura. Su extenso elenco estaba encabezado por Lupita Ferrer, Jeannette Rodríguez y Carlos Mata.

Un amor prohibido

Todo comenzaba cuando Victoria, una humilde campesina andina que trabajaba como sirvienta en casa de una distinguida y respetable familia de Mérida, se enamoraba de Ángel de Jesús, el único hijo de doña Luisa, una fanática religiosa obsesionada con purificar su alma y que obligaba a su hijo Ángel de Jesús a que se hiciera sacerdote.

Éste, antes de ingresar en el seminario, tuvo una noche de amor con Victoria y la dejó embarazada. Cuando doña Luisa se enteró, golpeó brutalmente a la pobre muchacha hasta que ésta le reveló su embarazo. La mujer la expulsó de su casa sin pagarle nada.

Dispuesta a no dejar que el futuro bebé le desbaratase los planes realizados durante tantos años, doña Luisa acosó a Victoria, le impidió conseguir un trabajo e incluso le dio a entender que no podría quedarse con la criatura cuando naciera. Por este motivo, Victoria terminó viajando a la capital y abandonando a su hija en una hermosa casa del este de la ciudad.

En busca de la hija abandonada

Pasaron los años y Victoria se convirtió en una bella y próspera ejecutiva, dura y cruel de carácter, dueña de la casa de moda Casa Victoria. Aunque rehizo su vida (se casó y tuvo otra hija) quiso dar con la hija que abandonó.

Esto que aquí les resumimos solamente es el comienzo de un laberinto de personajes malos como el diablo y otros buenos rayando en la santidad, de hijos no deseados, amores imposibles, maldades y crueldades pero en los que al final -no creo que nadie me va a reñir por el spoiler- ¡triunfa el amor!

Los nombres de Victoria Ascanio, Cristina Expósito "alías Cristal" o Luis Alfredo están unidos a esta telenovela que en 1990 se llevó un Premio Ondas a la Mejor Teleserie Iberoamericana. Tal fue el éxito de Cristal que en 1998 Televisa realizó una versión bajo el título de El privilegio de amar, la cadena brasileña SBT hizo lo propio en 2006 y de nuevo Televisa emitió otra versión entre 2010 y 2011 titulada Triunfo del amor.

Hablar del fenómeno Cristal en nuestro país está unido a un personaje: doña Adelaida, papel interpretado por la excelente periodista y gran persona que fue Chari Gómez Miranda (falleció en febrero de 2011). Profesional todo terreno (prensa, radio y televisión) y una de las grandes periodistas de su generación. En 1990 fue fichada por Jesús Hermida para hacer un breve resumen y comentario de Cristal.

Esta telenovela se emitía -al estilo de los magacines made in USA- dentro del programa A mi manera que presentaba Hermida en TVE. Bajo este simpático pseudónimo de doña Adelaida con su simpatía habitual, se metió a la audiencia en el bolsillo, encarnando a un personaje muy cercano a la típica ama de casa o “maruja” y realizaba un resumen divertido de lo que ocurría con las tramas de la historia.

Fue tal su éxito que tras finalizar Cristal y el programa de Hermida, ella continúo en TVE haciendo los resúmenes y comentarios de las telenovelas que se emitieron a continuación.... y es que si la huella de Cristal ha sido larga en este género que ahora bebe las mieles del éxito en Nova, el recuerdo de Chari Gómez Miranda seguirá unido a ella por los siglos de los siglos.