La 1 de TVE se alejó anoche por completo de su labor de servicio público en su programa de la noche de los sábados, La Pr1mera Pregunta, alimentando el debate sobre la dudosa alarma sobre los okupas en España que tanto están cebandos las televisiones privadas.
Lo hizo con una entrevista en pleno prime time con una duración de 10 minutos a un hombre que había sufrido la ocupación de una de sus viviendas y que cuestionó las cifras de ocupación que "se publican por ahí", sin que el presentador Lluis Guilera rebatiera esta afirmación.
Pero, además, el entrevistado llegó a demostrar ciertos pensamientos racistas al decir que "aquellos dos señores con móviles de alta gama que no hablaba ni papa de español ni de catalán".
Según publicaba El País, una estadística del Ministerio de Interior dice que en el primer semestre de 2020 hubo 7.450 denuncias de ocupación, frente a 7.093 del mismo periodo anterior. "Un ligero aumento de 357 más en toda España. El dato que se repite es: hay 41 denuncias al día. Pero 2019 fue igual, 40 al día".
Más tarde, el programa entrevistó a una cocinera de Badalona que hace tres años que tiene ocupado su piso mientras está pagando la hipoteca, al responsable de una empresa antiokupa y conectó en directo con unos vecinos de Chiva que reclaman desalojos exprés y más vigilancia policial.
Para contrarrestar todos estos testimonios, el programa entrevistó al juez Joaquim Bosch, magistrado y portavoz de Juezas y Jueces para la Democracia que aseguró que no hacen falta más leyes: el desalojo de vivienda es inmediato y la mayoría de casos se da en pisos vacíos de bancos.
Según la asociación de jueces Francisco de Vitoria, "eso de que te vas de casa, vuelves y hay gente nunca lo he visto, es excepcional. No tiene sentido, es que los propios okupas buscan casas abandonadas donde tengan menos problemas, por eso van a casas vacías de bancos. Eso tiene menores efectos penales, porque es usurpación, no allanamiento, y además viven más tranquilos”.