Pocos son los medios en este país que no se han hecho eco del caso Mainat. Y es que la historia tiene todos los ingredientes de una novela negra para mantener enganchado al lector: un intento de asesinato y otro de estafa, un productor de televisión, una herencia multimillonaria, una mujer desconocida, un escort…
Por ello no es de extrañar que desde Telecinco se hayan volcado con el caso y este viernes los distintos programas de la cadena lo convirtieran en un auténtico reality con conexiones en directo con la casa de Josep María Mainat que terminaron brindando surrealistas escenas. De hecho, incluso Angela Dobrowolski, esposa del productor, amenazaba a éste con contar sus trapos sucios a la cadena.
Sin embargo, la decisión de Telecinco va mucho más allá del morbo. Y es que cualquier profesional del sector audiovisual intuye que detrás de esta cobertura se encuentra un intento por parte de Mediaset España de convertir a Mainat en personaje y, por ende, mermar su figura profesional. Y eso a pesar de que el productor no quería que trascendiera este asunto.
Es algo así como pasó hace unos meses con el culebrón de Alfonso Merlos, cuya reputación profesional se vio seriamente afectada, o lo que hizo Sé lo que hicisteis en su día con el consejero delegado de Mediaset España, Paolo Vasile, al que quisieron poner cara para demonizarle.
¿El motivo? Una rivalidad entre Mainat y Vasile que viene de lejos. Concretamente desde 2008 cuando el productor y su socio Toni Cruz abandonaron Endemol Gestmusic después de serias desavenencias con el italiano.
Desde Telecinco se dijo que este abandono se debía a los pobres datos de audiencias que había obtenido el programa Operación Tony Manero. Sin embargo, los productores quisieron aclarar “que, obviamente, nuestra decisión de dejar la compañía que fundamos hace más de 20 años no se debe a algo tan banal como el cambio de horario de un show (Operación Tony Manero), sino que es el resultado de un deterioro progresivo de nuestras relaciones con Telecinco, que ha culminado en un grave conflicto relacionado con la puesta en marcha del nuevo programa de Xavier Sardà", añadían.
El programa en cuestión se trataba de La tribu, un nuevo late night presentado por Xavier Sardá para la noche de los viernes para pelear contra DEC y que fue retirado tras sólo un mes en antena y el polémico abandono de Mercedes Milá.
"Hace unos días, la dirección de Telecinco me comunicó oficialmente que no querían que Gestmusic produjese mi programa. Al conocer esta decisión, los directivos de Gestmusic dimitieron. Era, según ellos, la gota que colmaba su vaso", explicó entonces Sardà.
Sólo unos meses después de estas dimisiones y tras recibir el apoyo del Comité de Dirección de Endemol Internacional, Cruz y Mainat volvían a ocupar los mismos cargos que tenían de Presidente y Consejero y director creativo, respectivamente.
Aquella regreso duraría poco. A finales de 2010, los dos productores dejaban sus puestos al frente de la compañía, aunque seguirían al frente de Operación Triunfo 2011 y de Más que baile. Dos programas que siguieron provocando fricciones entre Mainat, Cruz y Vasile.
En el caso de OT, los productores catalanes querían seguir contando con Jesús Vázquez como maestro de ceremonias. Sin embargo, el italiano les impuso a Pilar Rubio, su gran fichaje estrella, algo que no les sentó nada bien.
“A un conocido exproductor de televisión, famoso por su misoginia y sus faltas de respeto, le sentó mal que designaran a Pilar como presentadora de Operación Triunfo”, contó hace unos años la directora de comunicación de Mediaset España, Mirta Drago, a través de su blog Fuentes Próximas.
“Como le fastidió la decisión de la cadena que le pagaba el producto, boicoteó el trabajo de Pilar, que no tenía acceso a los guiones hasta el último momento y que tampoco recibía las órdenes adecuadas por el pinganillo, básico para que un presentador pueda seguir el programa mientras se esmera en el directo. Del reconocido productor misógino, uno al que le gusta chillar, especialmente chillar a las mujeres, nadie habló. La furia cayó sobre Pilar”, aseguró en un post que fue apoyado por Risto Mejide, miembro del jurado de aquella edición.
“Yo fui despedido de OT en directo en 2009. A mí ese día quien me llamó no fue quien me había contratado, Toni Cruz, me llamó un tío que pasaba por ahí, y me dijo 'no hace falta que vengas esta noche, prescindimos de tus servicios”, contó Mejide en una entrevista en el extinto programa de La Noria.
Años después, además, una guerra virtual entre Mainat y Mejide destapó aún más problemas en aquella edición. “Iba en contra de la cadena y del formato. Animó a la audiencia a irse a Antena 3. Puedes ser crítico y divertido pero cuando eres desagradable y fuera de contexto, Simon Cowell nunca lo hubiera dicho, por eso el cobra 4 millones al año y él no", dijo en una entrevista en RAC 1.
"Es cierto, jamás he cobrado 4 millones de euros, todavía hoy no los cobro y seguramente jamás los cobraré. Ahora bien, si Simon Cowell cobra 4 millones por temporada (que no son 4, vaca sagrada, son bastantes más, infórmese bien), igual es porque sigue creando y produciendo formatos originales en todo el mundo (...) y no se ha pasado los últimos años encadenando fracaso tras fracaso con sus producciones, tanto aquí como fuera de nuestro país", le contestaba el publicista.
"La mayoría de cosas que decía Risto en Operación Triunfo las escribía yo", le espetó entonces el productor en Twitter, a lo que Mejide le dijo que “estos especímenes sólo saben regodearse en su mezquindad”.
En cuanto a Más que baile, Mainat reveló hace unos años que “incluso tuvimos que inventar el premio del jurado porque no podíamos tolerar que (Belén Esteban) ganara. Ese premio solo salió ese año".
“El fallo que tenía era que no se presentaba a los ensayos. Los demás concursantes se mataban y ella no se esforzaba a aprender los cuatro pasitos, si hubiera ensayado a lo mejor lo hubiera resuelto bien", comentó.