Desde hace ya casi quince años, el consejero delegado de Mediaset España, Paolo Vasile, empezó a apostar por productoras de confianza o participadas. De esta forma, el grupo conseguía un control más cercano sobre sus programas y, sobre todo, un exhaustivo ajuste de costes en los programas producidos ya se consigue una mayor rentabilidad gracias a una optimización de las sinergias internas.
Así, Mediaset apadrinó la creación de Mandarina Producciones, junto a los directivos del canal Santi Botello y Pedro Revaldería; La fábrica de la tele, junto a Óscar Cornejo y Adrián Madrid; Big Bang Media, junto al que era Director de Antena de Telecinco, Alberto Carrullo, y la jefa de ficción de Grundy, Mariana Cortés; o Bulldog TV, con los directivos de Magnolia, Alfredo Ereño y Angelo Rocca.
Todas ellas pasaron rápidamente a convertirse en sus productoras fetiche del grupo arrebatando la producción de programas a otras productoras en unos movimientos que fueron recibidos en el sector como poco éticos.
Por ejemplo, Salsa Rosa pasó de Boomerang TV a Mandarina Producciones, aunque cambiando su nombre a Sábado Dolce Vita; arrebató Las mañanas de Cuatro a Plural para dárselas también a Mandarina; o Supervivientes y Mujeres y hombres y viceversa pasaron de Magnolia a Bulldog TV.
Así, el grupo fue teniendo cada vez más programas producidos por productoras participadas. Sin embargo, había uno que se le resistía: El Programa de Ana Rosa, en manos de Cuarzo Producciones, productora propiedad de Ana Rosa Quintana y Banijay Group.
La venta de Cuarzo
Todo cambió hace unos años. Cuando Quintana vendió el 51% de sus acciones en Cuarzo Producciones a Banijay Group en el año 2008 por 18 millones de euros, la periodista se guardó la opción de que, pasados unos años, podría quedarse con las acciones que mantenía en la productora o ejecutar la opción de venta, como así hizo finalmente para centrarse en su vida familiar.
“He decidido vender mis acciones. No puedo hablar mucho sobre ello por la confidencialidad, pero en cuanto ocurra algo, lo comunicaré. Pero es algo que estaba previsto. Me merezco un poco de tranquilidad. Quiero dedicarme a mis hijos, que ya son preadolescentes, y al programa. Creo que me lo he ganado”, contaba a BLUPER en el verano de 2017.
A su vez, Mediaset España acababa de salir de una guerra con Banijay después de arrebatarle la producción de Supervivientes y Mujeres y hombres y viceversa a Magnolia -perteneciente a Banijay Group- para dársela a Bulldog TV, una nueva productora que había promovido Vasile.
Esto llevó a Banijay Group a emprender acciones legales contra Mediaset España por competencia desleal. La compañía acusó entonces al grupo que dirige Vasile de descapitalizar Magnolia al contratar al mismo equipo de profesionales que hasta hacía pocos meses realizaba los dos programas de Telecinco, y le pidió una compensación de 23 millones de euros. Finalmente, ambas empresas firmaron la paz.
En este contexto parece que fue cuando se coció la jugada que estos días hemos conocido, y que ha terminado con Quintana volviendo a la producción de televisión a través de Unicorn, y con Vasile haciéndose con parte de la producción de uno de los programas más importantes de Telecinco, El Programa de Ana Rosa, y que hasta ahora se le escapaba.
La llegada de Unicorn
El 31 de octubre de 2017, Quintana dejaba de ser consejera de Cuarzo Producciones y por ende productora de El Programa de Ana Rosa. Fue en este contexto en el que Xelo Montesinos, hasta entonces directora general de Cuarzo, decidió abandonar la compañía a finales de septiembre de 2017 y, tras un breve periodo en el Área de Contenidos de Mediaset España, se puso al frente de su propia productora de televisión, Halliwell Broker, que después pasaría a llamarse Unicorn Content.
Sólo unos meses después, el 1 de enero de 2018, Mediaset España decidía que la producción de El Programa de Ana Rosa y En el punto de mira pasara de Cuarzo Producciones a Unicorn Content, lo que desató una auténtica guerra entre Mediaset/Unicorn/Ana Rosa y Banijay/Cuarzo con varias demandas de por medio.
Esta guerra que terminaría saldándose en los tribunales en 2019 y en los que la justicia consideró que la presentadora no desplegó actividad alguna para evitar que Cuarzo dejara de producir El programa de Ana Rosa, mientras que Banijay tuvo que abonar 2,4 millones de euros a la presentadora por impago de acciones.
Ya a finales de 2018, concretamente el 23 de octubre, Mediaset España decidía entrar en el accionariado de Unicorn Content con un 30% de capital -se estima en 18,7 millones-, conviertiéndola así en una nueva productora de confianza en la misma línea que La Fábrica de la Tele, Bulldog TV, Alea Media o Mandarina Producciones.
La segunda productora con más horas de TV
Ahora, después de que la claúsula de no competencia entre Quintana y Banijay Group dejara de tener efecto hace más de 18 meses, Quintana vuelve a la producción de televisión de la mano de una productora de confianza de Mediaset España, algo que nunca fue Cuarzo Producciones. Según datos de las cuentas anuales de Mediaset, Unicorn Content tuvo unos ingresos de casi 24 millones de euros en 2019, con casi 2,7 millones de euros de beneficio.
Actualmente, Unicorn Content es la segunda productora de televisión con más horas de emisión inédita en las cadenas nacionales generalistas con 1.683 horas. La productora produce programas como El Programa de Ana Rosa, Ya es mediodía, Cuatro al día o En el punto de mira. También produce para Telemadrid el programa 120 minutos.
Por su parte, Cuarzo ha pasado en estos dos años de ser la segunda productora con más horas producidas en televisión a ser la quinta. Actualmente cuenta con Viva la vida (Telecinco), La isla de las tentaciones (Telecinco/Cuatro), Liarla Pardo (laSexta) o Madrid Directo (Telemadrid).