Este miércoles, Mask Singer: adivina quién canta emitió su quinta gala, la cual se alargó hasta pasada la una de la mañana debido a un cambio en su mecánica. Y es que por primera vez se enfrentaban entre sí los ocho participantes que quedan: Caniche, Camaleón, Cuervo, Cerdita, Catrina, Monstruo, Girasol y Pavo Real. De ellos, Catrina, Monstruo, Girasol y Caniche se batieron en una segunda ronda.
Finalmente, el público presente en plató convertía a Monstruo en el nuevo expulsado. Los investigadores Javier Calvo, Javier Ambrossi y José Mota, junto a Vanesa Martín que excepcionalmente sustituía a Malú, estaban seguros que era Fernando Tejero, y Mota y Calvo dijeon que si no lo era se raparía la cabeza. Finalmente acertaron en su predicción.
Analizando las pistas, de Monstruo sabíamos que era fan de Ana Belén (de quien Tejero estaba enamorado en su infancia), que el fútbol le había dado grandes satisfacciones en su vida (ganó el Goya por ‘Días de Fútbol’) o que es “el monstruo de los pescaditos”, en referencia a su primer trabajo de juventud como pescadero.
“Me engañaron para venir. Me gusta mucho cantar, y vi una oportunidad de hacerlo. He cantado con Sabina, Rozalén o Dani Martín” dijo el actor una vez se quitó la máscara. Sobre la dificultad del concurso reveló que el traje del Monstruo es un “ataúd” en el que uno termina “respirando su propio aire”. “Me lo he pasado bomba mirando por los agujeritos”, añadió, en referencia también al disfraz, que limita su visión.