Tras la caída por debajo de la barrera psicológica de los dos millones de La Voz Senior (14,6% y 1.998.000 espectadores) y La Voz Kids (14,3% y 1.910.000 espectadores), había serias dudas sobre el rendimiento que podría tener La Voz en su segunda edición en Antena 3, la séptima contando las previas emitidas en Telecinco.
Sin embargo, a falta de su gala final, el programa musical producido por Boomerang ha conseguido renacer como el ave fénix gracias a una serie de decisiones y despedirse como el talent musical más visto de la televisión con una audiencia media de un 18,2% y 2.282.000 espectadores. Un dato que se transformaría en un 19,7% y 2.236.000 si sus galas se trocearan como ocurre con MasterChef Celebrity o Idol Kids.
Lo hace, además, después de que Telecinco le haya atacado con todas sus fuerzas durante las últimas tres semanas con Cantora: La herencia envenenada, que en su primera entrega arrasó con 3,7 millones y ha promediado en sus tres entregas 3,1 millones de espectadores.
Sin embargo, el programa presentado por Eva González aguantó la embestida y durante sus últimas tres galas consiguió mantenerse por encima de la barrera psicológica de los dos millones.
Esta noche, además, tendrá que enfrentarse a Idol Kids, que estrena día de emisión para su final tras haber promediado un 16,7% y 1.884.000 espectadores en sus doce galas emitidas hasta el momento. Un dato que se transformaría en un 14,9% y 1.932.000 espectadores si el programa no estuviera troceado.
¿Por qué enfrentarlos?
Pero, ¿por qué ha decidido Mediaset España enfrentar Idol Kids a La Voz a pesar del riesgo que conlleva y siendo conscientes que emitiendo en lunes la final del talent infantil probablemente hubiera tenido mejor audiencia? De hecho este lunes Mujer anotó récord gracias a la ausencia del talent, con el que comparte público más adulto.
Por una parte, Idol Kids ya es un programa amortizado. Tras un comienzo titubeante, el talent también ha ido reviviendo en sus últimas semanas, mejorando sus datos hasta promediar un 16,7% de share y 1,9 millones de espectadores. De ahí que el dato de su final ya no sea tan importante porque no va a variar en exceso su media final.
Por otra, como ya explicamos hace unos días, desde que Atresmedia consiguiera arrebatarle los derechos de La Voz a su rival, el grupo comandado por Paolo Vasile ha llevado a cabo algunos movimientos que denotan que existe cierto ansia de venganza.
Así, tras descartar otro especial más de Cantora: La herencia envenenada, a Mediaset sólo le quedaba como arma para enfrentar a la final de La Voz las nuevas entregas de Volverte a ver, un producto con peor rendimiento que Idol Kids.
De ahí por tanto la elección del talent infantil, que durante las últimas semanas ha vivido una trayectoria ascendente hasta marcar en su última semifinal su mejor cuota de pantalla (18,2% con 2.127.000 espectadores), superando así en cuota a la última entrega de La Voz (15% y 2.134.000 espectadores).
Está claro que con este movimiento Mediaset también busca el goloso titular de que su talent gana al de la competencia. Sin embargo, teniendo en cuenta que Idol Kids está troceado y La Voz no, habrá que tener muy en cuenta su estricta coincidencia para declarar a uno u otro vencedor.