Soy malagueño, y como tal, he visto muchas horas de Canal Sur. Durante años, el programa estrella de la cadena fue Menuda noche, con Juan y Medio al frente, y un montón de niños salerosos a su alrededor. Críos que solían hacer preguntas más que guionizadas a los invitados, y que se esforzaban en muchos casos en ser los más graciosos de la pequeña pantalla.
El programa pronto vio en la música un filón, y así, creó a sus propias estrellas. Entre otras, se puede mencionar a la pizpireta María Figueroa, “la niña del pompón”, Abraham Mateo antes de convertirse en un fenómeno nacional, o María Carrasco, experta en colombianas, fandangos, bulerías y casi cualquier palo flamenco de raíces andaluzas.
Cada vez más niños de Menuda noche sacaban disco, y en 2009 les llegó el turno a los pequeños Jesús y Daniel Oviedo, que cambiaron la grada de colaboradores por el escenario bajo el nombre artístico de Menudos gemelos. Un trabajo que pasó más desapercibido que el de alguno de sus colegas antes mencionados, que sí se alzaron con algún disco de oro.
Tras su paso por Quiero cantar, en Antena 3, demostraron que lo de la música iba en serio durante su paso por La Voz Kids, en la edición de 2014, donde cayeron en la primera de las batallas, ya bajo el nombre artístico de Gemeliers. Sin embargo lograron un gran tirón entre niños y adolescentes, y desde entonces no han dejado de trabajar.
El primer disco lo publicaron con el nombre artístico de Menudos Gemelos
Cuando se anunció el fichaje de ambos por Tu cara me suena me dio pereza, lo reconozco. Quizá porque todavía veía en ellos aquellos pequeños hermanos (uno con gafas, el otro sin ellas) que hacían gamberradas en Canal Sur, que no eran más que unos de tantos jóvenes con cierta gracia y con ganas de triunfar. Incluso me echaba para atrás su nombre artístico, tan adolescente.
Lo bueno del programa de imitaciones de Antena 3 es que permite a cualquiera que participe dar salida a todo su talento, y en ese sentido, Gemeliers han sido todo un descubrimiento. Semana a semana han demostrado que dominan el escenario, que cantan muy bien, y que tienen una disciplina tremenda.
Un amplio registro de imitaciones
Gemeliers se han metido en la piel de artistas de lo más variado. De artistas urbanos como Don Patricio a artistas que les pillan más lejanos como El Puma y Julio Iglesias. Han superado retos muy complicados como imitar de forma individual al mismo artista, como fue aquella gala en la que ganaron como Pablo Alborán, y además, han roto tabúes sobre la masculinidad tóxica.
Pocos artistas cuyo nicho de mercado sean los jóvenes serían capaces de darlo todo en el programa con un personaje del sexo opuesto. El día que imitaron a Becky G y Bad Bunny, Jesús el encargado de emular a Becky se lo pasó pipa correteando por todos lados en tacones. En los ensayos, Míriam Benedit, la coreógrafa, le decía que tenía que ser “un poquito perra” y él le aseguraba que sería “la más perra”, sin miedo a que se juzgue su hombría, ni qué podría pensar su público, formado principalmente por chicas jóvenes.
Sin miedo a salirse de la zona de confort
Dejando a un lado su capacidad vocal, que la tienen, Gemeliers se han convertido en los mejores concursantes de la edición, y bien se merecerían alzarse con el triunfo en la final. No se han refugiado constantemente dentro de su propia voz, ni han buscado grandes números para lucirse dentro de su zona de confort (algo de lo que sí han pecado en exceso Cristina Ramos o Nerea).
Desde hace varias semanas los hermanos Oviedo están cuartos en la clasificación general, a pesar de que fueron los primeros primeros participantes en ganar hasta tres galas en la actual edición, algo que Nerea tardó tres semanas en igualar.Entendemos que, matemáticamente, están clasificados para la final y que pueden optar a la victoria.
La actual tabla clasificatoria no deja claro cuál es el favorito para ganar
La actual clasificación nos está garantizando una final muy interesante en la que casi cualquier cosa puede pasar, en el mejor de los sentidos. No hay un claro favorito, como lo fue Angy, Roko, Blas o Miquel, pues nos encontraremos una final con estadísticas variadas.
Por ejemplo, el mejor valorado hasta la fecha es Jorge González, que solo ha ganado dos galas, y una de ellas tras puntuar el doble el voto del público tras empatar con Cristina, y que además ha sido último una vez. En segundo lugar va Nerea, con tres victorias que nunca ha sido colista, en tercero Cristina Ramos con dos victorias y dos últimos puestos, y en cuarto Gemeliers, que han ganado tres veces y nunca han sido últimos. Todo dependerá de cómo arriesguen y a qué artistas imiten en esa fran final que cada vez está más cerca.