En los últimos años, Ylenia Padilla ha sido una de las colaboradoras más cotizadas de Telecinco. La joven confirmaba su éxito televisivo en 2015 al ser elegida como concursante de GH VIP 3, tras lo cual se convertía en tertuliana habitual de prácticamente todos los realities de la cadena.
Cuatro años después, Ylenia vivía una segunda época dorada al volver a Guadalix como concursante de GH DÚO, fichando además como colaboradora de Sálvame y Viva la vida. En el programa de Emma García parecía haber encontrado su hueco definitivo, pues todos los fines de semana estaba entre el plantel de tertulianos, entre el que estaba más que integrada, pero todo ha cambiado repentinamente.
La colaboradora lleva casi tres meses sin aparecer en el plató de Telecinco. En concreto, la última vez que estuvo en Viva la vida fue el domingo 15 de noviembre. Tampoco está presente en los debates de la tercera edición de La isla de las tentaciones, por lo que sus seguidores más acérrimos no paran de preguntarse qué ha sido de ella.
A esta ausencia se suma la escasa actividad de Ylenia en las redes sociales. Y es que la de Benidorm ha decidido privatizar su cuenta de Instagram y, desde el pasado 22 de septiembre, cuando subió su última foto posando en el plató de Viva la vida, sólo ha dado señales de vida a sus followers en una ocasión. Lo hacía el 10 de enero, con motivo de la histórica borrasca Filomena, compartiendo una imagen de la madrileña fuente de Cibeles nevada. "Me ha flipado empezar el año así", escribía.
En Twitter ha seguido la misma línea. La polémica colaboradora reaparecía el pasado 20 de diciembre tras un tiempo ausente y avisaba a sus seguidores: "Nunca me voy del todo, nunca vuelvo para siempre". Tras esa reveladora frase, sólo ha retuiteado cinco cinco publicaciones y, el pasado 9 de enero, compartía la canción For a better day de Avicii sin hacer ningún comentario ni reaccionar a las múltiples respuestas en las que sus fans le preguntan cuándo volverá.
Polémicas
La clave de la ausencia de Ylenia en televisión podría encontrarse en una de sus intervenciones en Viva la vida el pasado verano. La colaboradora se enfrentaba a 'La escalera de las emociones' del programa y se despojaba de su fuerte carácter para mostrar su faceta más vulnerable: "En mi vida siempre han sido el motor las emociones y la mala gestión sobre ellas. Eso siempre ha predominado ante mi inteligencia. Considero que mi inteligencia no está aprovechada al máximo", confesaba.
Esa visión de sí misma le provoca, tal y como ha desvelado, un gran complejo al salir en televisión: "No me puedo ver en la tele porque lo que veo no representa lo que soy. Veo a una Ylenia con un carácter muy agresivo. No sé gestionar mi impulsividad y acabo dando una imagen que digo 'que vergüenza de tía, normal que mucha gente no me pueda ni ver', aseguraba. Finalmente, la de Benidorm calificaba ciertos capítulos de su trayectoria televisiva como "un lastre" y sentenciaba: "Es una gran decepción conmigo misma".
Tras esto, la joven tuvo que enfrentarse a varias controversias como los testimonios de algunos seguidores que denunciaban un trato de desprecio por su parte en redes, o la lluvia de críticas que le generó el declarar abiertamente su desconfianza hacia la vacuna contra el coronavirus. Un protagonismo que ha podido desestabilizarla una vez más.
Su constante vulnerabilidad también quedó patente durante su participación en GH DÚO, programa en el que Ylenia se reencontró con el público tras otro período apartada de los focos. Allí reveló detalles sobre su conflictiva adolescencia: "Me fui a Gandía Shore en un mal momento de mi vida porque no me hablaba con mis padres y me habían detectado la enfermedad de Crohn. Allí la lie parda, tanto que salí a la calle y estaba avergonzadísima, porque lo que hacen las mujeres no se ve igual que lo que hacen los hombres", confesaba.
Según contó, los comentarios tras su paso por el reality de MTV le provocaron una fuerte depresión. "Tuve una depresión muy grande hasta que entré en GH VIP 3, lo que consideré como una segunda oportunidad para mí y así lo afronté". Sin embargo, su paso por Guadalix volvía a hacer tambalear los cimientos de su salud física y mental: "Desde ahí me sobrecargué de trabajo. Empezaron ahí mis problemas con el alcohol y la droga. Era la única forma de evadirme porque para mí la familia es lo más importante y llevarme mal con ellos no me dejaba vivir".
Teniendo en cuenta estos antecedentes, cabe pensar que Ylenia haya podido volver a sentirse superada por la exposición pública a la que se ve sometida por su trabajo. En cualquier caso, sus seguidores siguen esperando con ansia que cumpla lo prometido y no se haya ido del todo.