Con motivo de la celebración del Día Mundial del Docente en la jornada de mañana, 5 de octubre, la Internacional de la Educación quiere dedicar este día a honrar al gran número de víctimas que la pandemia se ha cobrado entre el profesorado de todo el mundo.
La Federación de Sindicatos de Trabajadoras y Trabajadores de la Enseñanza y de los Servicios Públicos lamenta "las muertes por el Coronavirus en el ámbito de la enseñanza, como las de José Antonio, profesor del IES Domingo Miral de Jaca, María Adela del IES Padre Feijoo de Gijón, Sonia, profesora del IES Canigó de Almacelles, Mario del IES Universidad Laboral de Toledo, quienes han perdido la vida a lo largo del curso pasado".
Asimismo, destacan la labor del profesorado que "realizó un ejercicio de esfuerzo, superación y valentía, pagando un alto precio en forma de contagios -se contabilizaron más de 25.000 positivos por COVID en los nueve meses de curso-, enfermedades y fallecimientos".
STECyL-i agradece, en su comunicado, "el esfuerzo realizado por las y los docentes" y reclama al Ministerio de Educación y las Consejerías y Departamentos de Educación "ese paso en favor de la enseñanza y de sus educadores que a menudo utilizan como reclamo político y que se traduzca, de una vez por todas, en hechos concretos, como la bajada de ratios, la reducción del horario lectivo, reconocimiento al profesorado de Formación Profesional y estabilidad laboral".
La Internacional de la Educación proclama, en este próximo 5 de octubre, que “para una mejor reconstrucción del mundo es preciso apoyar al profesorado y empoderarlo para que lidere la recuperación de la educación". Así mismo llama a aprovechar "esta oportunidad para solicitar a los Gobiernos que inviertan en el profesorado y que trabajen para mejorar su situación y sus condiciones laborales”.
Además, ha establecido como tema para 2021 "el profesorado en el corazón de la recuperación educativa". Hace hincapié en que el mundo "necesita desesperadamente a los y las docentes". Concluyen alegando que "a raíz de la pandemia, es probable que la escasez mundial de docentes se dispare debido a que muchos y muchas han fallecido a causa del virus, mientras que otros y otras han abandonado o tienen previsto abandonar la profesión.