El general de Brigada, Luis del Castillo Ruano, jefe de la XII Zona de la Guardia Civil, pidió hoy, en el día de su patrona, “incrementar nuestras plantillas de una forma sostenida y constante e, igualmente, afrontar la renovación de nuestros recursos materiales que se van quedando viejos y necesitan sus sustitución, poco a poco; sin prisa pero sin pausa”.
Así lo comentó hoy, en presencia del delegado del Gobierno; Javier Izquierdo, al finalizar el acto de celebración del Día del Pilar en la capital leonesa y como necesidad ante la realidad del país. “Dentro de la España vaciada nos encontramos en una situación, que venía produciéndose en los últimos años con la anterior crisis, de una disminución importante en cuanto a los relevos en la plantilla. La tasa de ingreso y de oferta de empleo público disminuyó sensiblemente, la pandemia ha complicado un poco más esta situación”, dijo y aludió al papel vertebrador del territorio que tiene la institución, inrormó Ical.
Esa cualidad vertebradora, manifestó en su intervención, “se ha visto reforzada con el aparentemente reciente descubrimiento de lo que se ha venido a llamar la España vaciada. La realidad, sin embargo, difiere un tanto de ese planteamiento ‘naif’ y nos obliga a cuadrar ese objetivo absolutamente deseable con unas condiciones laborables que han variado sensiblemente -para mejor- con las que se encontraban vigentes en el momento en el que nuestro actual despliegue fue implementado”.
“Porque esa mejora ha tenido consecuencias directas en cuanto a nuestro potencial de servicio; consecuencias que no se han visto neutralizadas por un sustancial incremento de la plantilla o una reorganización en profundidad”, reflexionó después de mostrar su satisfacción por el papel jugado por los miembros de la Guardia Civil durante la pandemia. “Nos hemos puesto otra gorra” dijo para referirse a la labor de velar por el cumplimiento de la normativa sumada a la función de auxilio y colaboración con las autoridades y los ciudadanos, “en la que volcamos lo mejor de nuestras capacidades”.
La Guardia Civil, afirmó, se encuentra en una disyuntiva, respecto a ese elemento vertebrador que en Castilla y León se traduce en un despliegue de ocho puestos principales, 244 puestos ordinarios y ocho puestos auxiliares. “Como institución con vocación de permanencia y comprometidos en el servicio al ciudadano estamos abocados a tomar decisiones”, remarcó antes de citar al escritor japonés Haruki Muramaki para sintetizar su opinión: “Cerrar los ojos no va a cambiar nada. Nada va a desaparecer simplemente por no ver lo que está pasando. De hecho, las cosas serán aún peor la próxima vez que los abras”.
El delegado del Gobierno en Castilla y León, Javier Izquierdo, repasó algunas de las prioridades que afronta España: transición ecológica, transformación digital y cohesión social, sobre el que destacó el papel “fundamental” del Cuerpo para garantizar el orden público y la paz social. “Tened presente siempre la gravedad de los delitos de odio, uno de los delitos más graves para nuestra convivencia que es uno de los valores que consagra el preámbulo de nuestra Constitución”, dijo.
“Nadie puede sentirse más que nadie, ni hacer daño a nadie, menos aún por su sexo, por su orientación sexual, por su raza, por su ideología… Nada justifica el odio ni la violencia, el odio solo destruye y vosotros trabajáis para hacer de la española una sociedad sana, respetable y respetada en el mundo por su convivencia y por su tolerancia”, añadió y reclamó un refuerzo de las convicciones en la lucha contra la trata de seres humanos, con especial atención a la que tiene por explotación sexual.
“Trabajad con un claro objetivo por inalcanzable que os parezca: que no haya una sola mujer víctima de violencia de género”, solicitó antes de pedir que se siga haciendo atractiva la Guardia Civil a las mujeres para que cada vez se incorporen más a las distintas escalas. “Que pronto veamos más equiparada la presencia entre hombres y mujeres en número y conozcamos también mujeres generales a la vez que se incrementa el número de tenientes coronel o comandantes”, pidió.
“Os insto a seguir siendo un modelo de neutralidad en el respeto a las instituciones públicas y a no escatimar esfuerzos en demostrar vuestra proximidad a la ciudadanía”, concluyó Izquierdo en su discurso en una celebración que también contó con la presencia de numerosas autoridades militares y civiles y representantes de distintos ámbitos de la sociedad, entre los que se encontraban el alcalde de la capital leonesa, José Antonio Diez, el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones y el secretario general del PSOE en la Comunidad, Luis Tudanca.
El acto oficial incluyó la formación de efectivos, la entrega de 29 condecoraciones, un turno de alocuciones, el homenaje a los guardias civiles fallecidos y un desfile.