La cascada de jubilaciones de médicos, la difícil distrbución poblacional y la organización de recursos sanitarios en Castilla y León son la justificación de la "necesidad ineludible" de la restructuración sanitaria que se plantea desde la Junta. Así lo ha asegurado el vicepresidente de la Junta y consejero de Transparencia, Ordenación del Territorio y Acción Exterior, Francisco Igea, en un encuentro con los periodistas previo a la clausura de la segunda jornada de “Respuestas innovadoras de la cooperación transfronteriza al cambio climático”, actividad celebrada en el Campus Viriato de Zamora.
Francisco Igea considera que "los grandes problemas necesitan grandes acuerdos", en referencia al descontento generalizado de la población rural con respecto a la reforma planteada por la Consejería de Sanidad y que, precisamente, tenía Zamora como punto de partida con el Plan Aliste; y a esa "necesidad" de cambiar el sistema sanitario actual por la falta de doctores y la dispersión demográfica. Por ello ha vuelto a atacar al Partido Socialista para recordar que "hemos querido que se sienten a hablar y negociar y no quieren debatir". El vicepresidente asegura que "esto en Alemania no sucedería porque habría un gran acuerdo ante un problema tan importante y nadie lo utilizaría como demagogia". Igea acusa a los socialistas de "vivir bien" en la postura de "señalar al culpable sin aportar soluciones", mientras que la Junta de Castilla y León "propone soluciones y asume los costes de no eludir nuestras responsabilidades", en referencia al descontento social por la restructuración sanitaria.