La Semana Santa en Castilla y León no es solo ver procesiones. Es mucho más. Y la gastronomía está ligada a todos los actos. Reúne el turismo religioso, cultural y gastronómico en cuatro días. Y es que no nos podemos imaginar estos días sin comer torrijas, sin disfrutar en familia de un rico potaje o de brindar con bebidas típicas de estos días.
Ya sea en León, Zamora, Valladolid, Burgos, Salamanca o cualquiera de las provincias de Castilla y León, el poder degustar de platos típicos es algo que no puede faltar. En su mayoría proceden de tradiciones muy antiguas y alguna tiene una curiosidad. Es tiempo de Semana Santa, es tiempo de disfrutar.