La Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO Castilla y León exigió a la Junta que se siente a negociar una reducción de las horas extras de los profesionales sanitarios, rebajando la jornada máxima en las horas complementarias con el objetivo de reducir los riesgos laborales y el desgate que sufren y favorecer la conciliación y el desarrollo profesional.
Asimismo, reclamó que su salario no esté ligado a estas horas, sino a la responsabilidad y titulación que tienen, lo que “añadiría atractivo a los puestos, reduciría el éxodo de profesionales y facilitaría su captación”, ya que, como denunció, otras autonomías, por ejemplo, se llevan a la mitad de los recién titulados en enfermería y ofrecen mejores condiciones de contratación y salarios a médicos de hasta 10.000 euros más.
La secretaria general de la Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO Castilla y León, Ana Rosa Arribas, explicó que remitieron una carta a la Consejería de Sanidad el pasado 27 de abril, para demandar una mesa de negociación de las condiciones de estos profesionales, y todavía no han recibido contestación, y la situación empeora cada día, ante unas plantillas cada vez más reducidas que obligan a elevar la presión sobre las existentes, que además envejecen.
Arribas lamentó que la Junta no hace nada frente a “opas hostiles” de otras autonomías hacia sus profesionales sanitarios y se llevan, por ejemplo, a la mitad de los recién titulados de enfermería. Al respecto, indicó que autonomías como País Vasco, Valencia o Cataluña, acuden a la Comunidad a dar charlas, en las que ofrecen mejores condiciones a estos recién titulados para cubrir sus necesidades para el verano, con contratos de seis meses, con ampliación a un año y hasta tres frente a los cuatro meses de la Junta, y retribuciones de hasta 5.000 euros más. Además, puso de relieve que otras autonomías ofrecen los contratos desde finales de abril, y empiezan a llamar, y la Junta se pone a la obra el 15 de junio “cuanto ya se han ido todos”. “No aprendemos”, dijo.
Asimismo, reclamó equiparar todos los hospitales de la Comunidad en nivel de investigación y formación, para captar a profesionales, que no encuentran atractivos los centros donde no pueden avanzar en sus técnicas, y se repartan así por todas las provincias.
La responsable sindical lamentó que hay 13 autonomías con mejores retribuciones que Castilla y León, con una diferencia de hasta 10.000 euros con la que mejor paga a sus médicos. Asimismo, denunció que las enfermeras sufren otra penalización, porque todavía siguen enclavadas en el grupo A2, de diplomaturas, cuando llevan diez promociones con titulación de grado, desde que entró Bolonia, lo que impacta en sus retribuciones.
Los profesionales médicos y de enfermería, dijo, hacen jornada anual de 2.304 horas anuales, con semanas, dependiendo del servicio y los hospitales y superan las 56 o 60 horas semanales, por lo que exigió reducir horas para mejorar la conciliación y la salud laboral de estas personas. “En urgencias deben hacer un diagnóstico, una analítica y una exploración cuando llevan 16 horas trabajando y están agotados”, denunció. Además, indicó que tiene una jornada complementaria especial voluntaria de 150 horas, pero “muchos ya la tienen interiorizada y la asumen como normal”, por la falta de profesionales.
“Cuánta salud te cuesta tu sueldo”, se preguntó, para concretar que las retribuciones de estos profesionales son de 1.200 a 1.500 euro mensuales y “todo lo demás son complementos, que están vinculados a la jornada laboral, es decir, a hacer guardias”. “Se les debe retribuir por responsabilidad y titulación, no por dejarse la vida en su trabajo”.
El secretario de Acción Sindical del Sector Público de la Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO Castilla y León, Salvador Escribano, precisó que de las 2.304 horas, 840 son jornada complementaria, horas extras, pero se consideran ordinarias y se pagan como tal, lo que repercute en elevados índices de siniestralidad, como refleja que España es el segundo país europeo con mayor nivel de accidentes.
Escribano puso de relieve que los profesionales también se marchan a otros países de Europa, donde no existen las guardias obligatorias y algunas se efectúan mediante telemedicina, con retribuciones que superan en 12.000 euros las de España.
Salvador Escribano también criticó que existe un decreto de mejoras para la fidelización de estos trabajadores que lleva sin aplicarse tres años, y mientras “nuestros profesionales se marchan en cuanto pueden a otros sitios mejor retribuidos”. “Las condiciones laborales no son buenas, las económicas tampoco, no se ha recuperado el porcentaje salarial perdido desde los recortes de 2010, ni el valor de las horas extras en su totalidad; o el de las horas de guardia, que lleva sin modificarse desde 2009; ni la vuelta a las 35 horas, que otras autonomías si tienen”, dijo, para sentenciar: “Nuestros profesionales se van”.