La Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL), ante las declaraciones hechas por el ministro de Agricultura en la inauguración de la feria SALAMAQ, se muestra "decepcionada" e insta a Planas a "visitar ganaderías y empaparse de la realidad".
UCCL lamenta que el ministro haya comentado que "la denuncia sindical no tenga ningún fundamento al situarse los precios pagados al ganadero en 45 céntimos el litro". La organización considera estas declaraciones del ministro "totalmente desconectadas de la realidad", y critica que al ministro "le parezca justo el precio que los ganaderos perciben por su leche cuando estos apenas consiguen cubrir los costes de producción".
En este sentido, señalan que "si de media en julio se percibían 46 céntimos por litro, el coste para producirla se estima en torno a 53-55 céntimos, lo que supone que no sólo no se cubre, sino que el ganadero vuelve a producir a pérdidas". La Unión de Campesinos destaca que "esto es un ejemplo claro de que la protección que debería haber dado al productor la reforma de la Ley de Cadena Alimentaria no está siendo tal, con la complicidad del Ministerio".
"Pagamos casi el doble por el gasóleo B que el año pasado, 2,34 veces más por la electricidad, 1,36 veces más por la alimentación… parece que quieren que nos quedemos con la noticia de que nos pagan más sin que veamos que lo que tenemos que pagar se ha incrementado aún más", denuncian desde la organización.
UCCL señala que Planas "parece no atender a los informes de su propio Ministerio cuando habla del sector lácteo. Estos indican que se llevan dando caídas de producción desde hace cuatro meses, algunos meses cercanas al 10% en caprino de leche, al 4% en ovino y en vacuno con reducciones progresivas de hasta casi el 5% en este mes de julio con respecto al julio pasado; y unos costes disparados". Así la organización reitera que es "la nula rentabilidad la que hace que cada vez sean más los ganaderos que deciden abandonar la actividad y cierran su explotación".
En este contexto, "el informe de declaraciones obligatorias del propio Ministerio de Agricultura indica que entregaron leche, en julio de 2022, 835 ganaderos menos que en 2021; mientras que la cifra habitual de desaparición de ganaderos es de en torno a 700".
Por otra parte, UCCL insiste en que las ayudas al sector fueron "totalmente insuficientes y supusieron, en muchos casos, un parche que prolongó la agonía del sector". En este sentido, la organización cree que "si el ministro está preocupado por el cierre de granjas, la solución no es aprobar un decreto que aumente las normas, sino hacer valer la ley de la cadena alimentaria y poner en marcha medidas que ayuden a reducir el impacto de los altos precios de los insumos necesarios para ello".
"El desabastecimiento no va a ser cosa de una semana, pero, de seguir así, que a nadie le quepa duda, en poco tiempo toda la leche será importada", advierten.
Asimismo, señala que "no es cierto que el número de sacrificio de vacas de leche haya sido el mismo que el pasado. De hecho, en lo que se lleva de año ya se habrían sacrificado 20.245 vacas, un 28% más que en todo 2021 según el informe de coyuntura del sector vacuno de leche del ministerio que el propio Planas dirige".
UCCL se muestra preocupada ante la "mala información de la que dispone el ministro" y pide "que se ponga las pilas para poder ejercer bien su trabajo". "Estas declaraciones denotan la desconexión con el campo del ministro Planas, haciendo oídos sordos a toda la movilización del sector lácteo, que no la vea justificada y que viva en los mundos de Yupi: póngase las botas y baje a hablar con los ganaderos", concluyen.