Volvía la actividad musical a la Sala Blanca del LAVA apenas quince días después de que Leiva ofreciera dos conciertos de quilates poniendo en pie a Valladolid. En esta ocasión le tocaba el turno a la banda colombiana Morat, cuatro veinteañeros con ganas de comerse el mundo, que ofrecieron un espectáculo de emoción y buena música.

Con 'Mi nuevo vicio' arrancaba el concierto bajo el clamor de un público entregado que congenió a las mil maravillas con los cuatro miembros de la banda cafetera.  Juan Pablo Villamil Cortés, Juan Pablo Isaza Piñeros, Martín Vargas Morales y Simón Vargas Morales disfrutaban en el escenario y eso se notaba.

Tras la canción que les hizo saltar al estrellato gracias al interés de Paulina Rubio en convertir una colaboración en el estallido de un sueño para los cuatro integrantes de Morat que pasaron de cantar ante 500 espectadores a hacerlo ante 18.000, llegaron temas con el amor y el desamor como eje vertebrador de las melodías.

Los acordes de ‘Mil Tormentas’, ese “No se puede apagar amor con fuego” o ese  “Te quieres desatar de mí pero hiciste un nudo ciego”, llegaron hasta los corazones de los asistentes que volvieron a recordar ese primer y duro desamor coreando a la par el tema con los artistas.

Tras esto, el 'Sé que te duele', una canción que promete ser de las más sonadas de este año y que realizan en colaboración con Alejandro Fernández o 'El Embrujo', un adelanto de los nuevos temas que los cafeteros están cocinando poco a poco y a fuego lento.

No podía faltar, claro está, el nuevo single. Ese 'Amor con hielo' que gusta tanto a los cuatro miembros de Morat como al público. Canciones cargadas de amor, de sentimiento que hacen pensar y que enganchan a los fans más acérrimos de una banda que acumula en su corta carrera un amplio repertorio de éxitos.

Morat llegó, vio y venció y se metió en el bolsillo al público pucelano en el décimo concierto de su gira por España. Esta banda promete y seguro que no será el último espectáculo que ofrezca en la capital del Pisuerga.