Investigadores de la UVa analizarán el impacto social de futuras pandemias
Su trabajo desarrollado a través del consorcio LOCOMOTION junto a otras 12 Universidades europeas permitirá a gobiernos e instituciones internacionales conocer el impacto de las medidas que adopten para paliar la crisis a partir de modelos de simulación.
Hasta ahora, estos Modelos de Evaluación Integrada (IAM), que analizan miles de variables tecnológicas, ambientales, económicas, sociales y políticas, tenían como objetivo orientar las decisiones políticas para la sostenibilidad.
El Grupo de Energía, Economía y Dinámica de Sistemas (GEEDS) de la Universidad de Valladolid analizará para la Comisión Europea el impacto de futuras pandemias como el COVID-19, así como de las medidas de reactivación de la economía que se adopten en Europa, con el objetivo de encontrar las mejores respuestas posibles a futuras epidemias desde el punto de vista socio-económico.
El análisis lo llevarán a cabo utilizando el modelo de simulación MEDEAS, que llevan desarrollando desde el año 2016 y en el que incluyen múltiples variables económicas, tecnológicas, sociales y ambientales, que combinándolas permiten conocer el impacto que produce la aplicación de unas u otras políticas económicas en el cambio climático.
Junto al modelo MEDEAS los investigadores emplearán también los modelos Eurogreen, de la Universidad de Pisa, y World7, de la Universidad de Islandia, utilizados dentro del proyecto europeo LOCOMOTION, del que forman parte estas universidades junto a otras nueve europeas. "Aunque estamos aún desarrollando los planes de trabajo para dar respuesta a esta petición, a priori creemos que tendrán dos fases: en el corto plazo, 4-6 meses, utilizaremos estos tres modelos de evaluación desarrollados por universidades del consorcio de LOCOMOTION para simular los impactos económicos y valorar posibles actuaciones. En el medio plazo, 12-18 meses, adaptaremos estos modelos para proponer las mejores respuestas posibles a futuras epidemias desde el punto de vista socio-económico", explica el coordinador del proyecto y profesor de la Escuela de Ingenierías Industriales de la UVa, Luis Javier Miguel González.
"MEDEAS, Eurogreen, y World7 son Modelos de Evaluación Integrada (IAM) que se han utilizado hasta la fecha para gestionar cuestiones sobre cambio climático y políticas energéticas. Pero mientras nuestro modelo, MEDEAS, integra de forma muy importante la economía y la energía y contempla los recursos energéticos del mundo finito; Eurogreen incorpora muchas ideas de economía ecológica y World7 está más orientado a la gestión de minerales", añade Margarita Mediavilla Pascual, profesora titular en el Departamento de Ingeniería de Sistemas y Automática de la EII de la Universidad de Valladolid.
Durante la primera fase de la investigación que llevarán a cabo para la Comisión Europea los investigadores tomarán datos provenientes de 62 sectores distintos, y de distintos organismos, como la Agencia Internacional de la Energía (energía) o la FAO (alimentación, agricultura o agua potable).
En la segunda fase, según explica Margarita Mediavilla, se procederá a la "simulación de escenarios, que consiste en ver cómo pueden evolucionar las políticas y los parámetros del modelo de forma realista. Esta segunda parte es muy delicada, ya que se corre el riesgo de que se utilice como un oráculo que da unas predicciones sin que se sepa cuáles son las causas y las dinámicas que se crean. El modelo ha de ser transparente y servir para evaluar las consecuencias de las políticas, nos permite saber qué sucederá si se hace una cosa u otra. Por ello es necesario ser muy transparente y honesto con los parámetros que se introducen al modelo, porque sólo es una herramienta para evaluar los datos que nosotros le damos y, si le damos datos irrealistas elegidos a priori, puede servir para darnos cualquier resultado. El modelo utiliza la capacidad de cálculo de los ordenadores para ayudarnos a pensar de forma un poco más sistémica y global, pero no debe servir para pensar por nosotros”.
El Grupo de Energía, Economía y Dinámica de Sistemas (GEEDS) que desarrolla el modelo MEDEAS lo forma un equipo multidisciplinar de 15 investigadores fijos y 30 colaboradores de las ramas de Ingeniería, Físicas, Economía, Sociología, Filosofía, entre otros. Comenzó a trabajar en el año 2008 sobre perspectivas energéticas con un primer modelo que llamaron WoLiM (WorldLimitsModel) basado en el análisis de recursos físicos de energía, economía y medio ambiente. Sobre este modelo e incorporando análisis de datos de los impactos ambientales, sociales y económicos surgió MEDEA, que está siendo ampliado y mejorado en el proyecto LOCOMOTION.
"Lo bueno de estos modelos es que nos permiten estudiar muchos datos y muchas relaciones a la vez. Esa integración de muchos factores da a MEDEAS una potencia tremenda. Nos permite ver aspectos que no son fáciles de ver cuando se trabaja sin modelos. La mente de un responsable político por sí sola, aun teniendo la mejor voluntad, no es capaz de ver los problemas con toda esta complejidad ni de prever todos los efectos secundarios. El modelo le permite hacer políticas más globales, más sistémicas. Esto lo hemos visto en nosotros mismos en repetidas ocasiones: según desarrollábamos nuestros modelos nuestras opiniones respecto a algunos temas cambiaban porque los integrábamos en el modelo y veíamos los resultados, que eran diferentes de lo que a priori habíamos pensado", concluye Mediavilla.
En la actualidad el GEEDS trabaja también en el desarrollo de un modelo de simulación y evaluación integrada energía-economía-cambio climático (modelo MODESLOW) que permitirá valorar la transición energética de España hacia una economía baja en carbono en el horizonte 2030-2050, dentro del programa de investigación del Plan Nacional de I+D del Ministerio de Ciencia e Innovación.