El Vicerrector de Investigación de la Universidad de León (ULE), Carlos Polanco de la Puente, y el Director de la Biblioteca Universitaria San Isidoro, Santiago Asenjo, asistieron ayer a la presentación oficial de la exposición itinerante ‘Enrique Gil: un romántico en la construcción de Europa’, organizada por la Progressive Alliance of Socialists and Democrats, la Biblioteca de la ULE y la Biblioteca Enrique Gil, con la colaboración de Acción Cultural Española (AC/E) y del Ayuntamiento de Astorga.
Carlos Polanco de la Puente puso de manifiesto la “gran colaboración entre la institución educativa –cuya biblioteca digital cuenta con toda la obra del escritor– y la ciudad de Astorga, con la que, además, el poeta estaba estrechamente vinculado”.
La exposición ofrece una nueva imagen y una nueva lectura de Enrique Gil ―en clave europea y contemporánea― y rescata del olvido una figura política y literaria de talla internacional y pone en valor una ejemplar trayectoria europeísta, la del poeta, periodista y diplomático berciano y leonés Enrique Gil (1815-1846), bien conocido por la novela templaria El Señor de Bembibre. Gil fue un destacado diplomático español en Europa: el primero en estudiar a fondo la unión aduanera prusiana ―Zollverein―, antecedente directo del mercado común y de la actual Unión Europea.
La muestra inició su recorrido en la Casa Botines de León, y tras pasar por Astorga, viajará a Villafranca del Bierzo, Madrid y Ponferrada, para finalizar en octubre próximo en el Parlamento Europeo de Bruselas. La exposición ha sido comisariada por el escritor Valentín Carrera, director de Biblioteca Enrique Gil y editor de las Obras Completas del romántico leonés, con producción gráfica de Campus na nube.
En cuanto al contenido, a través de 27 paneles y una decena de manuscritos, la exposición desmonta las fakenews sobre Gil ―que nunca firmó ni fue conocido en su tiempo como ‘Gil y Carrasco’―, revelando su ideología progresista, su relación con la masonería o su homosexualidad. Frente a la imagen falsa de un rostro envejecido (Gil murió con 30 años), Carrera y Suñén proponen una nueva lectura icónica: la de un joven de 28 años, elegante, atractivo y dulce de carácter, camino de Berlín, donde trabó amistad con Alexander von Humboldt.
Valentín Carrera ha rescatado la figura de Enrique Gil a través de esta muestra que permanecerá en Astorga hasta agosto, en horario de mañana y tarde, de 11:00 a 14:00 y de 19:00 a 21:00 horas.