El consejero de Cultura y Turismo, Javier Ortega Álvarez, ha participado hoy en la presentación del balance de la campaña de excavaciones en los yacimientos de Atapuerca que este año, tras la situación creada por la COVID-19, se han reducido a 25 días, en vez de 45, y han participado un menor número de investigadores. A este respecto, el consejero ha destacado que Atapuerca es un punto de conexión entre múltiples actores, un ejemplo de colaboración entre las administraciones estatal, regional, y también las locales, fundaciones, universidades diversas, investigadores, voluntarios y el público en general: “Todos ellos han sido capaces de demostrar unión y sobreponerse a las restricciones impuestas por las medidas de protección sanitaria y las limitaciones en cuanto al número de activos, para no poner freno ni ralentizar una exitosa trayectoria que dura ya más de 40 años y que ha convertido a Atapuerca en una de las más destacadas señas de identidad cultural de nuestra tierra”.
La Junta de Castilla y León financia la investigación y difusión llevada a cabo, tanto por la Universidad de Burgos, como por la Fundación Atapuerca y viene contribuyendo con el Sistema Atapuerca, que hoy cuenta con un centro de cabecera, el Museo de la Evolución Humana (MEH) y como centros dependientes, el Centro de Arqueología Experimental de Atapuerca (CAREX) y el Centro de Acceso a los yacimientos de Ibeas de Juarros (CAYAC), y un centro vinculado, el Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana.
Inversiones para la protección de los yacimientos
Además, la Consejería de Cultura y Turismo ha ejecutado en los últimos años siete instalaciones para la protección de los yacimientos, como los cierres de la Cueva Mayor, Cueva Peluda y de Cueva del Mirador; el cierre de la Trinchera del Ferrocarril y las cubiertas del conjunto Galería/cueva Zarpazos; de las trincheras de la Gran Dolina y del Elefante y la Cueva Fantasma. Esta última fue acometida en 2018 por parte de la Junta de Castilla y León y supuso una inversión total de casi 300.000 euros. Esta instalación protege la gran extensión que ocupaban las cavidades, pudiéndose así llevar a cabo las labores de investigación de este yacimiento con la seguridad y eficacia que se requiere, posibilitando ampliar el conocimiento de la ocupación humana durante el pleistoceno en el conjunto de la Sierra de Atapuerca.
En cuanto a las mejoras más recientes, el pasado día 8 de junio finalizó la construcción de la estructura de refuerzo de la cubierta del yacimiento de Dolina, con un presupuesto de 50.000 euros y está prevista la construcción el próximo año de otra cubierta de protección en el yacimiento Penal. En estos momentos está en supervisión el proyecto. Estas actuaciones se suman a las numerosas que la Junta de Castilla y León ha acometido en este proyecto, donde la inversión en tareas de conservación y protección de los yacimientos desde 1984 supera los siete millones de euros.